La Superliga europea va tomando forma y eso es una realidad. La competición que pretende enfrentar a los grandes clubes del continente, impulsada por equipos como el Real Madrid o el Barcelona, avanza hacia su creación aunque todavía a unos pocos años vista. Lo que antes parecía un proyecto totalmente oculto, ahora va asomando tímidamente la cabeza mientras se va formando.
Lo último ha sido la reunión de esta semana entre Andrea Agnelli y Florentino Pérez en Turín. No solo son los presidentes de dos de los clubes más poderosos de Europa como son Juventus y Real Madrid, respectivamente, sino que también lo son piezas claves en el puzle de los clubes a nivel europeo y mundial. Agnelli es el presidente de la ECA (asociación de equipos europeos) y Florentino de la WFCA (Asociación Mundial de Clubes de Fútbol).
Todavía hay muchas cuestiones para las que se busca respuesta en cuanto a la Superliga e, incluso, hay algunos 'grandes' que aún dudan de ella. Es el caso del Bayern Múnich, cuyo presidente, Karl-Heinz Rummenigge, expresaba sus temores esta misma semana. Lo que sí está claro es, como también dijo el presidente bávaro, la UEFA ha de reaccionar si no quiere que en 2024, fecha hasta la que tiene firmados los derechos televisivos, su 'imperio' se desmorone.
La UEFA tiene que salvaguardar su preciado diamante, la Champions League. Si los grandes clubes se 'van' a la Superliga y pasan de la Champions, se acabó el negocio. Eso es así. De ahí que en la máxima organización continental ya estén estudiando cambios a corto y a medio-largo plazo para su competición y que esta no se vea apartada de la escena principal del fútbol europeo.
La Superliga y la Champions podrían convivir, sí. El prestigio del torneo hace que sean muchos los clubes que no se quieran desligar de la competición y su historia, pero hace falta que se adapte al panorama que puede surgir de aquí a unos pocos años con la Superliga. Lo primero, sin duda, estaría en el formato.
La UEFA está considerando una Semana del Fútbol como una gran atracción futbolística
También Rummenigge dio voz días atrás a los cambios que estudia la UEFA: "Está considerando una Semana del Fútbol como una gran atracción futbolística, un poco como la Super Bowl. Eso suena bien, a los aficionados les gustará en mi opinión", revelo el dirigente bávaro. Sería algo similar al emocionante proyecto que se vivió en Lisboa la temporada con la Final a 8 de la Champions, obligada por la pandemia.
¿Una Champions a lo Copa?
¿Sería la Champions algo así como una Copa europea -es decir, a lo que la Copa del Rey es para La Liga-? Sin duda, sería una forma para que la Champions sobreviviera en un marco conjunto con la Superliga. Eso sí, el formato actual tendría que ser transformado siendo la fase de grupos la parte que mayor peligro correría.
"La fase de grupos de la Champions es aburrida. La competición se ha vuelto monótona y debe cambiar", dijo Rummenigge casi dando voz a la opinión de los grandes clubes de Europa. "Si juegas en un sistema de eliminatorias, el ganador se lo lleva todo. El perdedor, que de otra manera hubiera tenido una segunda oportunidad en un partido de vuelta, queda eliminado", añadió.
La UEFA podría devolver la Champions a su origen, un formato de eliminatorias mucho más frenético en comparación al actual. La Superliga y la Champions quedarían identificadas cada una a su manera y diferenciadas entre sí, aunque se da por hecho que los equipos de la Superliga (18 a priori) entrarían en la lucha por la 'Orejona' cada año. El resto de equipos (el total actual es de 32) podría salir de una fase previa de clasificación.
Obviamente, todo se encuentra en un estado prematuro y la postura de la UEFA no es otra que rechazo absoluto a la Superliga. Sin embargo, según va cogiendo forma la Superliga, toca empezar a pensar en la convivencia de ambas competiciones para conformar el plano futbolístico europeo. Eso sí, entraría en juego otro debate: ¿dónde quedarían las ligas nacionales?
[Más información - Florentino Pérez lidera el cambio: "La reforma del fútbol no puede esperar"]