La Real Sociedad se sobrepuso al tropiezo en Europa League ante el Manchester United y goleó sin miramientos a un Alavés que no encuentra soluciones. Isak anotó un hat-trick y el cuadro de Alguacil terminó ampliando la paliza en el tramo final. [Narración y estadísticas: Real Sociedad 4-0 Alavés]
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Sin duda, el resultado final apenas se podía percibir en un inicio de partido marcado por la calma en el juego y la escasez de ocasiones. La Real tomó el mando del juego y optó por retener la posesión en busca de algún espacio. El Alavés, con una defensa adelantada, apostó por aislarse en su campo a la espera de una oportunidad a la contra. Las ideas estaban claras y las ocasiones apenas llegaban.
Contra todo pronóstico, sería el Alavés el primero que pondría en alerta al rival. Deyverson, activo en los balones altos del conjunto de Abelardo, cabeceó tras una buena jugada de Córdoba y rozó el primer tanto del partido. La buena intervención del arquero dejó todo en un susto y, además, acabó con el peligro del Alavés hasta bien entrada la segunda mitad.
La Real poco a poco iba carburando y el Alavés se encerraba por completo. Faltaba esa puntería para el cuadro txuri-urdin que rompiera la sequía. Y llegó justo antes de que se cerrara la primera mitad. Esa línea defensiva tan adelantada le costó la vida al Alavés. Un gran pase al hueco para Isak dejó al delantero sueco con un mano a mano a escasos metros de la portería. Pacheco poco podía hacer. El goleador no perdonó y, en el 41', permitió a los locales irse a vestuarios con un marcador favorable que confirmaba su superioridad.
Isak se corona
Una vez abierto el cajón de los goles, la segunda mitad se convirtió en un infierno para el Alavés. La Real encontró con mayor facilidad los espacios y consiguió generar mucho más peligro. Haciendo gala de esa calidad en el toque de balón, en el 49' Isak se reencontró con el gol. En esta ocasión con David Silva como asistente y con un balón ligeramente picado ante Pacheco. El 2-0 acababa con cualquier esperanza del Alavés.
El rodillo, sin embargo, no había hecho más que empezar. Minutos después, con el Alavés aumentando sus intentos en ataque, Isak firmó su hat-trick en una acción de delantero centro puro. Oyarzabal llegó por banda, puso un centro perfecto y el atacante no tuvo más que empujar el esférico para sentenciar. La guinda llegó por medio de Portu diez minutos después. Al Alavés prácticamente le faltaba tiempo para asumir el golpe anterior y ya tenía el 4-0 en el marcador.
Portu, de nuevo a pase de Silva, se plantaba solo ante Pacheco y la cruzaba a la perfección para celebrar la goleada. El Alavés no tenía opción y menos cuando Lucas Pérez fallaba un mano a mano sin oposición. El triunfo estaba hecho y las heridas de la jornada europea levemente curadas.
La Real recuperó sensaciones tras el batacazo ante el Manchester United en la Europa League y se aprovechó de un Alavés que sigue sin reaccionar en La Liga y que suma una nueva goleada en la competición doméstica.