Este lunes se descubrió que la Guardia Urbana de Badalona había denunciado a un futbolista del Olympique de Marsella por organizar una fiesta ilegal en una vivienda de la localidad, en la que participaron una treintena de personas, todas ellas sancionadas por saltarse las restricciones de la Covid-19. Ahora se ha desvelado la identidad del jugador, que es el español Pol Lirola.
La policía local acudió durante la noche del domingo a una casa de la urbanización Mas Ram, de uso turístico, después de que varios vecinos se quejaran del ruido pasado el horario del toque de queda. En algunos momentos, según publican medios locales, el número de personas en la fiesta llegó a superar las 50.
Además de Lirola, otro jugador del Marsella fue identificado, siendo un total de 33 personas a las que los policías cogieron sus datos. Según La Provence, el otro futbolista que estuvo en la fiesta fue el argentino Leonardo Balerdi.
Diari Ara informa que algunos de los participantes de la fiesta se escondieron al llegar las autoridades, que desalojaron en su totalidad la vivienda a las 3:00 horas de la madrugada. Horas antes, a las 23:00, un vecino dio el aviso a la policía de Badalona por el ruido provocado por la fiesta en un hogar de la urbanización Mas Ram que se alquila por 670 euros la noche para organizar todo tipo de aglomeraciones. Según el citado medio, Lirola aseguró a la policía que era una "cena de seis personas".
Sanción del Marsella
El comportamiento de Lirola y Balerdi, de 23 y 22 años respectivamente, tendrá consecuencias. La Provence ya ha adelantado que tanto el catalán como el argentino recibirán una sanción por parte del Marsella, perdiéndose el partido del próximo domingo contra el Dijon.
El club quiere evitar que la actitud imprudente de sus dos jugadores pueda acabar con el contagio del resto de la plantilla, por lo que, además, Lirola y Balerdi serán aislados pese a no ser positivos por coronavirus hasta el momento.
El asunto está en manos de Pablo Longoria, presidente del Olympique de Marsella, y Jorge Sampaoli, entrenador del primer equipo, que consideran necesaria una sanción, aunque entienden que se trata de un error fruto de la juventud.
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