El Granada jugaba en Los Cármenes un duelo histórico ante el Manchester United. Los de Diego Martínez recibían a toda una estrella del fútbol europeo en el partido correspondiente a los cuartos de final de la Europa League. Ida de la elimiantoria, estadio vacío y toda la atención sobre el césped. Sin embargo, una vez el balón ya estaba rodando, un aficionado saltó al terreno de juego completamente desnudo y obligó a parar el encuentro.
El hecho de que un sujeto interrumpiera el duelo ya llamó la atención, pues la prohibición de que accediera público al partido dejó la grada del estadio completamente vacía a excepción de alguna butaca ocupada por miembros del club. Pero el espontáneo en cuestión consiguió esquivar el veto y, saltando desde una de las esquinas del campo, accedió al césped y obligó a hacer un breve parón en el partido. Sin nada de ropa y ante la estupefacción de los jugadores, fue expulsado por los cuerpos de seguridad.
El encuentro se vio suspendido durante algo más de un minuto y pudo reanudarse sin mayor problema. Sin embargo, probablemente se tenga que abrir una investigación para determinar cómo se coló el aficionado en el recinto deportivo y por qué no fue detectado hasta saltar al terreno de juego de Los Cármenes. Un detalle anecdótico para el primer partido de cuartos de final de la Europa League que disputa el Granada en toda su historia como club.
Pese a la aparición del aficionado, el Granada impulsó una campaña con sus socios y abonados para no perder esa conexión pese a los tiempos de pandemia. Tal y como se hizo público en redes sociales, el club nazarí envió por correo electrónico las entradas online para el duelo ante el United. No tenían validez debido a esa prohibición de jugar con público, pero sí un gran valor sentimental. Los aficionados que debían estar presentes en Los Cármenes recibieron su entrada y podrán tener un recuerdo de la eliminatoria.
Además, se repitió la nota negativa de los últimos grandes partidos. Y es que volvieron a verse aglomeraciones de aficionados para animar a los suyos. En los últimos días, con motivo de celebraciones como la Copa del Rey o encuentros de La Liga, hubo grupos de hinchas que acudieron a ciudades deportivas o inmediaciones de los estadios a animar a sus plantillas. Unas imágenes que hicieron saltar las alarmas por el riesgo de contagio y el incumplimiento de las restricciones sanitarias impuestas por las autoridades.
En el caso del Granada, a la salida de los jugadores hacia el autobús, numerosos seguidores del conjunto andaluz obligaron a levantar un dispositivo de seguridad con vallas y agentes. Poca distancia de seguridad, algunas mascarillas mal puestas y nuevas concentraciones que generan preocupación en tiempos de la Covid-19.
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