La llegada de la nueva Superliga Europea al mundo del fútbol ha provocado que se cree un nuevo efecto en cadena donde muchos organismos tienen que posicionarse. Por un lado se encuentran los 12 clubes fundadores de esta nueva competición y por otro lado están los diferentes estamentos que se han mostrado contrarios a la nueva apertura del fútbol lejos de su control.
A nivel global, tanto la UEFA como la FIFA ya han mostrado su desaprobación a la nueva competición que ha llegado impulsada por el enorme esfuerzo y trabajo del Real Madrid, el Manchester United y la Juventus de Turín. El máximo organismo del fútbol europeo ha asegurado incluso que habrá sanciones para los equipos y los jugadores que participen de esta nueva competición. Las más duras, además de los ataques económicos, serán las de no poder participar en otras competiciones.
En lo que se refiere al fútbol nacional, en España, las dos instituciones que se encargan de controlar el deporte rey también han secundado las versiones de UEFA y FIFA, a pesar de que la Superliga se trate también de una buena oportunidad para el campeonato nacional de crecer. Tanto la Real Federación Española de Fútbol de Rubiales como LaLiga de Javier Tebas han mostrado su desaprobación.
Sin embargo, no son los únicos que lo están haciendo, ya que también hay varios equipos que se han querido desmarcar de momento de este movimiento revolucionario que cuenta con el apoyo de los grandes de la liga española, la Premier League y la Serie A. Estos son los casos especialmente de los dos equipos más potentes de Alemania.
En primer lugar era el Borussia Dortmund quien se alejaba de este nuevo movimiento que ya es una realidad y que pretende echar andar la próxima temporada, en el mes de agosto. Hace unos minutos ha sido el Bayern Múnich quien ha decidido dar la espalda al magnánimo proyecto que pretender hacer brillar al fútbol europeo con luz propia alejado de la sombra de la UEFA.
La postura del Bayern
El conjunto alemán, a pesar de ser uno de los grandes de Europa a la altura de otros miembros fundadores como el Milan, el FC Barcelona o el Liverpool, ha decidido quedarse al margen de este proyecto, al menos por el momento. Por ello, esta nueva Superliga se ha gestado sin la presencia del gigante bávaro.
Su director general, Karl-Heinz Rummenigge, ha manifestado así su apoyo a la UEFA y a la nueva Champions, la cual ha sido anunciada también este lunes: "El FC Bayern no ha participado en la planificación de una Superliga. Estamos convencidos de que el actual modelo del fútbol garantiza una base seria. El FC Bayern acoge con satisfacción las reformas de la Champions League porque creemos que es el paso adecuado para el desarrollo del fútbol europeo. La ronda preliminar modificada contribuirá a generar más tensión y emoción a la competición".
"No creo que la Superliga vaya a solucionar los problemas económicos de los clubes europeos derivados por el coronavirus. Más bien, todos los clubes de Europa deberían trabajar de forma solidaria para garantizar que la estructura de costes, especialmente los salarios de los jugadores y los honorarios de los asesores, se ajusten a los ingresos para que todo el fútbol europeo sea más racional". A pesar de la postura mostrada por el Bayern, los 12 clubes firmante del acuerdo para la creación de la Superliga cuentan con el equipo alemán y esperan que se una en un futuro cuando el proyecto empiece a dar sus frutos al igual que lo esperan del Borussia Dortmund y del PSG.
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