La 'manada' del fútbol italiano: acusan a cinco jugadores del Virtus Verona de violación grupal

Cinco jugadores del Virtus Verona, club que milita en la Serie C italiana (tercera categoría), fueron acusados de violar a una chica de 20 años en enero de 2020 y la justicia decidirá tras la audiencia preliminar si abre un juicio con acusación de violencia sexual en grupo.

La chica, estudiante universitaria, acusa a los cinco jugadores por hacerle tomar demasiado alcohol y violarla en grupo después de que perdiera lucidez, informan este sábado los medios italianos.

Los cinco jóvenes, todos entre 21 y 29 años, jugaban entonces para el Virtus, aunque tres de ellos ya han cambiado de equipo. Cuatro de los cinco, supuestamente, violaron a la mujer, mientras el quinto habría filmado lo ocurrido con un teléfono móvil. Los jugadores niegan las acusaciones al asegurar que la relación sexual fue acordada con la chica, según los medios italianos.

Comunicado del club

"Por lo referido a las noticias de la prensa, el club Sociedad Virtusvecomp Verona quiere voluntariamente limitarse a subrayar que se trata de algo privado, ocurrido fuera del contexto deportivo, por el que la justicia está investigando", aseguró el equipo en un comunicado oficial.

"El Virtusvecomp Verona, mostró de forma inmediata sensibilidad y atención, limitándose al mismo tiempo a sus deberes y dando máxima confianza a la justicia, considerada la única capacitada para juzgar", agregó. El club, que no se encuentra de ninguna forma involucrado en lo ocurrido, informó además de que va a defender su imagen con todas las medidas legales necesarias.

La Lega se pronuncia

El presidente de la Lega Pro, Francesco Ghirelli, ya se ha pronunciado sobre las acusaciones: "Me preocupa como gerente deportivo y como hombre de familia", ha señalado. "Nunca hubiera querido escuchar una noticia así como directivo porque valores como el respeto a los demás, que profesamos incluso fuera de la cancha, se llaman en cuestión. Al mismo tiempo hay un aspecto humano, también pienso en las familias de la joven y los jugadores, sus amigos, su red social, el presidente de Virtus y el club. Pienso en el malestar y la angustia que están sintiendo", explicó en una nota.

La próxima audiencia preliminar será en unas dos semanas y las autoridades analizarán los vídeos grabados por los futbolistas.