Las oficinas de Real Madrid y Barcelona echan humo y solo hace unos días que ha acabado la temporada. Dos de los tres 'grandes' del fútbol español están obligados a renovarse tras un año lejos de las expectativas y no están perdiendo el tiempo en los primeros compases del mercado de fichajes.
El Real Madrid ya tiene atado a David Alaba, tanto que este martes pasó por la capital y visitó Valdebebas para terminar de cerrar su contratación. El Barcelona ya tiene cerrados a Eric García, Kun Agüero y Georginio Wijnaldum, el último en llegar a un acuerdo verbal con la entidad azulgrana. Cuatro fichajes que no han supuesto gasto alguno para las arcas merengues y culés al terminar contrato con sus anteriores clubes.
La austeridad reina en esta primera semana post-temporada cuando hace dos veranos los gastos se disparaban en Real Madrid y Barça. Los blancos gastaron 355 millones de euros en un verano en el que se fichó a Eden Hazard y Luka Jovic, entre otros. En el caso de los azulgrana, se gastaron 292 'kilos' con Antoine Griezmann y Frenkie de Jong como fichajes estelares.
Son las consecuencias de la pandemia. La crisis del coronavirus lo ha cambiado todo y ahora los grandes buscan fichajes a coste cero para ajustar al máximo sus gastos. Pero el Madrid tiene un as en la manga, una diferencia que marca las opciones en el mercado de fichajes de cada uno.
El verano pasado
El Madrid supo apretarse el cinturón hace un año y llevó al máximo la premisa de reducir gastos en el mercado. No hubo fichajes, siendo la de Martin Odegaard la única incorporación tras regresar de su cesión. Cero euros gastados y 105 millones ingresados por ventas como las de Achraf Hakimi o Sergio Reguilón.
En cambio, el Barcelona acudió al mercado para tratar de buscar algo de ilusión tras el varapalo que fue el 2-8 ante el Bayern y ver al Madrid ganar La Liga. Entre fichajes y ventas el resultado fue una plusvalía de solo 17 millones de euros, una cifra que se queda corta frente a las grandes pérdidas que todos tuvieron que hacer frente por la crisis.
Los siguientes movimientos
Esa diferencia entre lo que hizo uno y otro el verano pasado es una de las claves para que el Barcelona, tras atar las tres contrataciones citadas anteriormente, siga pensando en fichajes a coste cero, como sería el de Memphis Depay. El Madrid, sin embargo, tras Alaba, piensa en grande y, aunque necesitará vender también, aspira a reventar el mercado con un fichaje galáctico: Kylian Mbappé.
Real Madrid y Barça se mueven en el mercado para reforzarse. De momento, lo hacen a coste cero, pero los blancos quieren dar el gran golpe del mercado. El Barça, por su parte, no podrá y se centra en renovar a Leo Messi. Joan Laporta tendrá que esperar para volver a ilusionar a la afición culé con grandes fichajes. Florentino Pérez quiere hacerlo este verano.
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