Luis Rubiales y la RFEF se han postulado en la gran batalla que se ha creado en torno a la venta del 10% de LaLiga al fondo CVC. El organismo del fútbol español ha mostrado su total rechazo al acuerdo, como ya han hecho el FC Barcelona o el Real Madrid, que en su caso ya ha denunciado y ha llevado el caso a la Justicia. A pesar de todo, este jueves está prevista su aprobación en la Asamblea de la patronal con los 42 clubes de la Primera y la Segunda División.
La Federación se ampara prácticamente en lo explicado en los datos de este acuerdo que publicó en exclusiva EL ESPAÑOL este miércoles. El contrato cerrado beneficia principalmente a Javier Tebas como presidente de LaLiga y al fondo CVC y perjudica a los clubes que más dependen de la RFEF, los que están fuera del fútbol profesional.
El mandamás de las principales competiciones de fútbol en España presidirá la nueva empresa que se creará dentro de este negocio y que se llamará Hold Co. Este ente se encargará de la actividad comercial de LaLiga a través de la que se canalizarán las cifras que se han acordado con CVC, donde este organismo inyectará 2.700 millones de euros para paliar las graves consecuencias que ha tenido el coronavirus, pero que los clubes irán pagando los próximos 50 años, la duración del acuerdo.
La Federación, en un extenso comunicado, ha dejado claro que "debe manifestar su oposición" y ha dado varios argumentos: "Por razones legales, indudablemente generarán numerosos litigios derivados del acuerdo y pueden poner en duda su propia viabilidad. También por razones económicas, dado que se gravan intensamente los derechos de los clubes y SAD para los próximos cincuenta años a cambio de una cantidad de dinero poco significativa".
El organismo federativo ha subrayado también que "el acuerdo acrecienta la desigualdad e imposibilita de una manera capital y definitiva una evolución razonable del formato de la competición de fútbol profesional en España". Es curioso cómo se refiere a la consecuencia que tendrá la firma: "La competición queda petrificada sin posibilidad de evolución o sólo se pueda modificar cuando un tercero ajeno a la estructura deportiva así lo decida, hecho que vulnera de manera flagrante la ley y el modelo deportivo europeo".
"Competición petrificada"
La Federación utiliza este término para calificar una de las consecuencias negativas del acuerdo. Se refiere a la desigualdad entre los clubes que ahora mismo se encuentran en categorías más humildes y el resto, que sí se encuentran enmarcados dentro del fútbol profesional (Primera y Segunda División). Cabe destacar que las divisiones inferiores están a cargo de la RFEF.
La Federación recuerda que "los clubes que disputan competiciones no profesionales, en el momento de su ascenso a la competición profesional" no podrán competir en las mismas condiciones que antes, ya que "verán que sus ingresos se encuentran reducidos por la retribución de CVC, sin que hayan obtenido ningún beneficio por la aportación de esa entidad". Es decir, los clubes de Segunda B que asciendan la próxima temporada tendrán que pagar las consecuencias del acuerdo a 50 años sin recibir nada de las cantidades que repartirá el fondo nada más firmar el convenio con LaLiga a los que juegan ahora en Segunda.
Más represalias
Si Tebas ya se va a encontrar entre la espada y la pared con las medidas judiciales que va a interponer el Real Madrid, la RFEF ya avisa de que se puede sumar. El ente presidido por Luis Rubiales también indica que, en caso de que se incumpla el Real Decreto Ley 5/2015, se verán obligados a tomar acciones legales. Una posición que, apuntan, también podría tomar el CSD.
"Si la LNFP pretende ahora saltarse los controles y disminuir las aportaciones a que el Real Decreto-Ley le obliga, la RFEF se verá obligada a ejercer las acciones legales que procedan para defender sus derechos y los del fútbol no profesional. En este punto conviene recordar que el Consejo Superior de Deportes se encontraría en la misma situación que la RFEF".
Como señalaba el Real Madrid en su primer comunicado, la Federación también entiende que LaLiga se ha excedido en sus competencias con los derechos audiovisuales. El hecho de acordar con CVC el 10% de los beneficios que de la explotación de los partidos de la competición durante 50 años cuando, por ley, está establecido que esta venta sea a tres años lo refrenda. Además, no se ha producido en condiciones de competencia con varias ofertas.
Respuesta de Tebas
Javier Tebas, minutos después de conocer la respuesta de la RFEF, ha reaccionado en sus perfiles oficiales criticando la postura de la Federación. "Por fin la RFEF saca el esperado comunicado sobre la Superliga apoyando a UEFA y ligas. ¡Ah, no! Que sobre un proyecto que liquidaba al fútbol español ni se pronuncian. Eso sí, para atacar a LaLiga no fallan. Hay que seguir instrucciones... ¡si ni se han estudiado los documentos!", ha escrito el presidente de LaLiga.
En un comunicado, la patronal ha subrayado que "en ningún caso se olvida al fútbol no profesional, ya que tiene entre sus objetivos destinar determinadas cantidades a través del CSD y de la propia RFEF reforzando así las medidas de solidaridad legalmente ya previstas".
Además, critica a la RFEF porque "no tiene atribuida la representación de los clubes miembros de LaLiga los cuales tendrán la oportunidad de mostrar su postura" en la Asamblea del día 12. Y concluye: "LaLiga rechaza el conjunto de opiniones subjetivas y falsarias que la RFEF realiza de forma gratuita a lo largo de todo el mundo".
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