La UEFA ha dictaminado que la Football Association se enfrentará a una sanción de dos partidos sin que Inglaterra pueda jugar en Wembley con público, uno de los cuales está suspendido, y una multa de 100.000 euros por las caóticas escenas que arruinaron la final de la Eurocopa entre la selección británica e Italia el pasado 11 de julio. El organismo continental explicó que cientos de personas sin boletos intentaron romper barreras, torniquetes y puertas para entrar en el encuentro.
La FA asumió lo sucedido. "Aunque estamos decepcionados con el veredicto, reconocemos el resultado de esta decisión de la UEFA. Condenamos el terrible comportamiento de las personas que provocaron las vergonzosas escenas en el estadio de Wembley y sus alrededores en la final de la Eurocopa 2020 y lamentamos profundamente que algunos de ellos hayan podido entrar al estadio. Estamos decididos a que esto nunca se pueda repetir, por lo que hemos encargado una revisión independiente, liderada por la baronesa Casey, para informar sobre las circunstancias involucradas. Seguimos trabajando con las autoridades pertinentes en apoyo de sus esfuerzos por tomar medidas contra los responsables y exigirles cuentas", sentenció.
La UEFA también consideró otros aspectos del comportamiento de los aficionados dentro del campo antes y durante el partido, que Inglaterra perdió en los penaltis contra Italia. Esas infracciones fueron la invasión del terreno de juego, el lanzamiento de objetos, el abucheo del himno nacional italiano y el encendido de un fuego artificial. Los organizadores del torneo abrieron un procedimiento disciplinario contra la FA el 3 de agosto y emitieron las sanciones este lunes que, como mínimo, dejarán el Inglaterra - Albania del 12 de noviembre sin público.
La UEFA ha demostrado este verano que está dispuesta a tomar medidas drásticas contra las asociaciones cuyos aficionados tienen un comportamiento en los estadios reprobable. Por ejemplo, también castigó a Hungría con dos partidos a puerta cerrada en las competiciones del organismo continental y pagar otra multa de 100.000 euros por los comentarios racistas y homofóbicos durante la fase de grupos de la Eurocopa 2020.
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