El Manchester United es uno de los pocos clubes de la Premier League que no ha cerrado ningún fichaje durante el mercado de invierno, pero los red devils han sufrido un cambio más significativo que lo que cualquier cara nueva en el equipo pudiera suponer. El motivo es que Ed Woodward ya ha dejado de ser a todos los efectos el vicepresidente ejecutivo del club y arranca con ello una nueva era en la entidad.
La noticia se sabía ya desde el pasado mes de abril. Woodward iba a dejar el Manchester United a principios de 2022, siendo víctima de la fuerte oposición de los aficionados a la Superliga Europea. La fecha señalada ya hace ya nueve meses era el 31 de enero, momento en el que puso fin a una etapa que arrancó en 2013.
Woodward era el jefe del United, si bien los propietarios son otros, los hermanos Glazer. Ellos delegan en la figura del vicepresidente deportivo las funciones que viene a tener un presidente de un club en España, desde asuntos deportivos (fichajes y entrenadores) hasta otros relacionados con infraestructuras, por ejemplo. Las decisiones de Woodward siempre fueron criticadas por su afición.
El sucesor de Woodward, Richard Arnold, lo tendrá a priori más fácil que su predecesor, puesto que este tenía la responsabilidad de recoger el testigo de David Gill. Este decidió dejar a gestión de las operaciones en el club en el momento en el que también partió el legendario Sir Alex Ferguson. Llenar el hueco de un emblema así era misión imposible.
La primera gran piedra en el camino de Woodward, precisamente, fue la designación de un sustituto para Ferguson. El elegido fue David Moyes, que acabó siendo un completo fracaso. Tampoco le ha ido mejor con los que vinieron después: Louis van Gaal, Jose Mourinho y Ole Gunnar Solskjaer. Al noruego le ha reemplazado recientemente el alemán Ralf Rangnick, quien puede haber sido solo un parche hasta final de temporada.
Se dice que Arnold, el relevo de Woodward, quiere a Mauricio Pochettino como entrenador de su United. La elección del técnico no será su única tarea, ya que tendrá que mejorar el papel de Woodward en cuanto a fichajes. En defensa del ya exvicepresidente ejecutivo de los red devils, con él se fichó a Paul Pogba (el fichaje más caro de la historia en ese momento) y se recuperó a Cristiano Ronaldo este verano.
Quién es Richard Arnold
¿Quién es el nuevo mandamás del United? Arnold es una apuesta interna del grupo que es propietario del club. Ha ejercido como director general del grupo y también fue su responsable comercial, supervisando su división de operaciones y combinando dicho papel con la presidencia de la fundación del Manchester United.
Arnold también tiene historia dentro de otras empresas importantes. Entre 1993 y 1999 fue manager especializado en telecomunicaciones y medios de comunicación en PwC y, más tarde, trabajó en la privatización de Saudi Telecommunications Corporation y en la salida a Bolsa de la operadora Orange en Reino Unido. Tras más de una década dentro de la estructura del United, Arnold se pone a los mandos de la nave.
"Esperamos que Richard y su equipo directivo inicien una nueva etapa en la evolución del club a través de ambiciosos planes de inversión en Old Trafford, sumados al fortalecimiento de nuestro compromiso con los aficionados y al impulso continuo de alcanzar nuestro objetivo más importante: ganar dentro del campo de juego", le decía en su bienvenida uno de los copresidentes del club, Joel Glazer, en un comunicado.
Tiene trabajo por delante en un club considerado como uno de los grandes del mundo, de los que más masa social reúne, que pasa por un proceso de renovación, abriendo recientemente un sistema para que sus aficionados puedan comprar acciones y formar parte de ciertas tomas de decisiones.
En números rojos
Un punto clave será la remodelación tanto del mítico Old Trafford como de la ciudad deportiva, aunque lo que de verdad preocupa es solventar los problemas económicos provocados por la crisis del coronavirus. El cierre de la temporada 2020/2021 se saldó con pérdidas de 108,1 millones de euros -cuadriplicando los últimos registros-, si bien facturó 579 millones.
A Arnold le tocará poco lidiar con su primera gran polémica en la plantilla tras la detención de una de las grandes promesas del equipo, Mason Greenwood, por presunta violación y agresión a su pareja. Eso y la obligación de reducir la masa salarial le obligarán a tomar decisiones con la primera plantilla muy pronto. Los aficionados del Manchester United cruzan los dedos para volver a estar entre los grandes.
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