La Premier League lucha en los despachos para situarse en la élite del fútbol mundial por delante de otras competiciones nacionales. Al mismo tiempo, los clubes participantes se ven en problemas por los comportamientos inapropiados e incluso delictivos de algunos de sus jugadores. Entre otros casos, en los dos últimos años ya se ha hablado de violaciones, encarcelamientos y hasta maltrato animal.
La polémica más reciente ha salpicado al West Ham. El conjunto inglés, ahora en la quinta posición de la liga inglesa, se ha enfrentado a las denuncias contra Kurt Zouma por posible maltrato animal. El jugador francés protagoniza unos vídeos filtrados donde agrede a su gato con patadas y golpes que no dejan lugar a debate. El club ya lo ha condenado y los hechos se investigan. Sin embargo, la noticia ha dado la vuelta al mundo.
Zouma, defensa de 27 años, ha pedido perdón a la vista del revuelo generado. "No hay excusas para mi comportamiento, que lamento sinceramente" ha sido su disculpa pública. Pese a ese veloz mensaje, su regreso a los terrenos de juego y el pertinente recibimiento de los aficionados es toda una incógnita. La imagen del jugador ya está manchada y la Premier está en boca de todos por un nuevo escándalo.
Kurt Zouma (West Ham) peleando un balón contra Amari Morgan-Smith
Esta dinámica de investigaciones y conflictos extradeportivos no es nueva. Ni Kouzma es el primero en acabar con el absoluto protagonismo del fútbol ni es el que ha estado presente en el peor escenario. Y es que en los dos últimos años se han sucedido varias presuntas violaciones, delitos sexuales contra menores y hasta el arresto de Benjamin Mendy, principal detenido entre los grandes rostros de la Premier League.
El defensa francés fue apartado del Manchester City nada más conocerse la noticia en 2021. Desde entonces, el galo no ha pisado los terrenos de juego y ha hecho acto de presencia en diversas vistas judiciales. A él se le acusa de nueve delitos sexuales por agresión y violación sexual. Hechos que, según la información dada, se produjeron en los dos últimos años y que han ido en aumento una vez iniciada la investigación.
El caso de Mendy ha sido el más mediático y complicado por las numerosas denuncias que se han presentado. Todo lo contrario que lo vivido por Naby Keita en 2020. El jugador del Liverpool fue denunciado públicamente por un presunto intento de violación. La víctima lo anunció en redes sociales y, según explicó, el propio jugador y su abogado intentaron disculparse en privado con ella. No se conocen detalles de la investigación y Keita continúa jugando, pero la denuncia zarandeó su carrera.
Si el 'caso Keita' estalló en verano, en noviembre las autoridades dieron un paso al frente en otro club. Tal y como informaron medios británicos, una estrella de la Premier League fue detenida por otra presunta violación. La identidad del jugador no acabó llegando a los medios, por lo que su imagen esquivó las críticas. Sin embargo, ya supuso un nuevo episodio en la competición.
Los escándalos del 2021
El año 2021 fue el más complicado en este aspecto. Además de las denuncias y detención de Benjamin Mendy, la Premier vivió otros dos casos. Uno de ellos en el Brighton, donde un jugador de unos 20 años fue detenido por una presunta agresión sexual. El club confirmó la investigación, pero se quedó al margen y no filtró la identidad al ser un asunto legal.
Tampoco se conoció el autor de un presunto delito sexual contra menores de otro jugador que saltó a la prensa en verano. Sin embargo, los datos que se empezaron a conocer redujeron el cerco hasta señalar a Sigurdsson. El jugador del Everton no ha vuelto a jugar desde entonces, cuando fue suspendido por la propia entidad hasta que se aclarara lo sucedido.
Mason Greenwood en un partido con el Manchester United
Greenwood, señalado a sus 20 años
El último caso se ha saldado con el castigo a Greenwood. El jugador del Manchester United ha sido acusado de agresión y violación por su pareja a sus 20 años. Nike ya ha cancelado el contrato que tenía con la joven estrella y el club no quiere contar con él. La Premier, pese a todo, vuelve a revivir la pesadilla de la mala conducta de sus jugadores.
A favor de todos los clubes ingleses está la rápida actuación contra sus jugadores, bien con suspensiones o con investigaciones internas. En contra de la Premier, la mala imagen mundial que están dando sus estrellas con constantes escándalos de este tipo.
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