El encuentro Niza-Colonia, de la primera jornada del grupo D de la Conference League, debía de haber comenzado a las 18:45 horas locales, pero fue retrasado casi una hora por incidentes violentos entre ambas hinchadas sucedidos en el Allianz Riviera de la ciudad francesa.

Un grupo de seguidores alemanes encapuchados atravesaron una parte de las tribunas para dirigirse a la zona donde están los ultras del Niza.

En un tuit, el alcalde de Niza, Christian Estrosi, ha condenado "los comportamiento incívicos y escandalosos de los hinchas del Colonia" tanto dentro como fuera del estadio. Más de 10.000 seguidores germanos habían acompañado a su equipo en la ciudad francesa, donde se han registrado incidentes a lo largo de toda la jornada.

La tensión fue creciendo en la previa del encuentro y los aficionados del Colonia tuvieron peleas con los locales hasta el punto de que un aficionado se cayó de una grada del estadio, quedando gravemente herido, según informó el medio galo RMC Sport. En ese momento, las fuerzas y cuerpos de seguridad lanzaron gases lacrimógenos para tratar de dispersar a las masas en medio de una vorágine violenta en la que aparecieron bengalas y se llegó a reportar la tenencia de armas blancas por parte de algunos aficionados.

Tras los incidentes, el capitán del Colonia, Jonas Héctor, hizo el siguiente anuncio a la afición en el estadio: "Tenemos muchas ganas de jugar el partido con vosotros. También queremos que el juego suceda. Pero tenemos que decir que no aprobamos esto, no nos gusta verlo en absoluto".

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"Trabajamos duro en este último año y en los juegos de playoffs. Y nos gustaría mucho hacer eso contigo, y por eso te pido: mantén los nervios, mantén la calma, apóyanos lo mejor que puedas. Eso es lo que quiere el club también. Que estemos juntos y en paz solo celebremos el fútbol y no la violencia. Gracias", añadió.

Tras los graves disturbios vividos en las gradas del estadio del club francés la tranquilidad volvió a reinar y pudo disputarse el encuentro.