Hay imágenes que nunca deberían verse en un estadio de fútbol. Este sábado, en el Nuevo Mirandilla, se vivió una de ellas. Un aficionado sufrió un problema cardiovascular en la recta final del encuentro entre el Cádiz y el FC Barcelona. De inmediato, Del Cerro Grande paró el duelo y comenzó el trabajo de los sanitarios por salvar la vida al hombre.
Las noticias fueron llegando con cuentagotas. Al principio, no se sabía si era un hombre o una mujer. Tampoco qué había sucedido. Fue entonces cuando se vio a los sanitarios realizar masajes cardíacos en la grada. Luego se reveló que era un hombre octogenario el que sufrió el problema cardiovascular.
Los esfuerzos de los sanitarios continuaron, mientras el silencio se hacía en el Nuevo Mirandilla. Tanto los jugadores en el campo como todos los integrantes de ambos banquillos miraban al fondo en el que estaba salvándose una vida. Y de repente, aparece Conan Ledesma en cámara con un desfibrilador entre sus manos.
El portero del Cádiz se fue hasta su banquillo para recoger el desfibrilador y se fue hacia el fondo sur del Nuevo Mirandilla para que el aparato pudiese ser utilizado por los servicios médicos. Continuó así la tensión máxima en el estadio, con jugadores visiblemente emocionados y con otros como Ronald Araujo rezando.
Pasaron diez minutos, un cuarto de hora y a los veinte, Del Cerro Grande mandó a los futbolistas de Cádiz y Barça al vestuario. Aunque no todos pudieron abandonar el campo. Algunos, muy preocupados por la situación, siguieron todo lo que sucedió desde el banquillo.
Segundo susto
Entonces llegó el segundo susto de la tarde. Un cámara se desmayó, teniendo también que ser atendido por los servicios médicos y estabilizado. Mientras se estabilizaba a este, la noticia más esperada por todos: el aficionado que sufrió el problema cardíaco había sido estabilizado, llevándosele en ambulancia hasta el hospital más cercano.
Manuel Vizcaíno, presidente del Cádiz, habló con la Cadena COPE y anunció que el partido se iba a reanudar. Había pasado casi una hora desde que se paró el encuentro. Con el 0-2 en el marcador y el campo prácticamente vacío, el balón echó a rodar. Llegaron todavía dos goles más por parte de los culés.
Lo celebraron los jugadores del Barça, aunque también algunos pidieron perdón por hacerlo después de todo lo sucedido en el Nuevo Mirandilla. Finalmente, 0-4 en el marcador y la sensación de que el verdadero partido que importó en Cádiz fue el que libraron los sanitarios y el aficionado.
Después del choque, Xavi Hernández explicó cómo vivieron todo desde la banda: "Por suerte, le han podido reanimar. Ha sido una situación muy desagradable. Esperamos que él y su familia estén bien. Es una situación difícil. Estábamos de acuerdo en reanudar el partido. Hemos esperado acontecimientos. Esperamos una pronta recuperación. Era un tema de humanidad. Sale la calidad humana".
"Nos llegaban informaciones contradictorias. Pero le han reanimado. El fútbol está por debajo de la vida, si le hubiera pasado algo se hubiera suspendido. Hemos intentado que los jugadores siguieran concentrados, pero estamos hablando de una vida humana. Todo dependía de si la persona se podía reanimar. No ha pasado una desgracia, por suerte. En el vestuario, deseábamos que el hombre se reanimara. El árbitro ha estado sensacional. Las tres partes estábamos de acuerdo, era de sentido común. Había momentos que nos decían que no había nada que hacer. Hemos estado en contacto", sentenció el entrenador del Barça.
El acta arbitral
Del Cerro Grande actuó con rapidez, algo que también ayudó a salvar la vida del aficionado. En su acta, escribió lo siguiente: "En el minuto 36:10 de la segunda parte, nos percatamos que en el fondo de la derecha según se sale de vestuarios, un espectador estaba sufriendo un problema de salud severo, por lo que decidí interrumpir el partido para que todos los medios sanitarios en el estadio pudieran realizar las actuaciones necesarias con dicha persona. Pasados unos minutos, y viendo que la situación no evolucionaba, ordené el abandono de jugadores y entrenadores a sus vestuarios, a la espera de la evolución de la situación".
[Así vivimos en directo los angustiosos minutos en el Nuevo Mirandilla]
"Una vez se me informa de que la persona en cuestión había sido evacuada del estadio, mantuve una reunión con delegados, entrenadores y capitanes de ambos clubes, así como con el Delegado-Informador y los Directores de Partido de la LFP, trasladándoles dicha información y manifestándome todos ellos su conformidad con la reanuadación del partido, llevándose a efecto a las 21:05 horas, y finalizando el mismo sin ninguna otra incidencia más", agregó el colegiado madrileño.
Ayuda de un aficionado
En Carrusel Deportivo, Hugo García, técnico sanitario, habló de la experiencia: "Cuando llegué, ya le estaba atendiendo un médico junto a los servicios sanitarios de la Cruz Roja. Como soy conocido de ellos, les dije que si podía ayudarles y, por suerte, ha salido todo bien". "El Cádiz tiene cubierto toda la grada con servicios sanitarios, cuando llegó el desfibrilador de Ledesma, ya había otro y un monitor", destacó el sanitario.
Otro héroe sin capa también apareció en el Nuevo Mirandilla. Una de las imágenes del partido la protagonizó un aficionado que se recorrió el campo para ayudar en la reanimación. Cardiólogo de profesión, el médico habló con la COPE sobre lo vivido en el campo: "La situación ha sido extremadamente grave, pero ha salido. Él no salió consciente del campo, se le ha intubado y se le administró medicación para sedarlo. Estaba sedado, por eso no estaba consciente".
Juan Jesús, que así se llama el médico y socio del Cádiz que no dudó en ayudar a sus compañeros de profesión para salvar la vida a un hombre, destacó que tendría más de 70 años y que fueron "hasta tres descargas previas al traslado". "Ha salido", señaló. La mejor noticia de todas.
Comunicado del Cádiz
"Cuando se cumplía el minuto 81 quedó pausado el encuentro ante el Fútbol Club Barcelona como consecuencia de una alerta sanitaria en la grada de fondo sur. El protocolo establecido con la Cruz Roja entró rápidamente en funcionamiento, asistiendo a un varón en paro cardíaco.
Hasta la grada se desplazó uno de los equipos médicos con un desfribilador y el monitor, comenzando las tareas de reanimación. Paralelamente, el Fútbol Club Barcelona ofreció un segundo desfibrilador por si fuera necesario su uso, siendo desplazado hasta la zona por los propios jugadores.
La reanimación fue positiva pasados unos minutos, siendo el aficionado trasladado a la UCI del Hospital Puerta del Mar donde permanece ingresado.
Además, uno de los operadores de cámara de Tribuna sufrió un desvanecimiento del que también fue rápidamente atendido por el cuerpo médico del estadio sin mayores consecuencias.
La entidad quiere agradecer el comportamiento ejemplar de los aficionados de fondo sur ante esta situación, al igual que a los miembros de seguridad y Cruz Roja por su rápida actuación para que esta incidencia tuviera final feliz".