Terribles imágenes vuelven a acaparar la actualidad deportiva en España. Esta vez llegan desde el norte, donde se enfrentan Racing de Santander y Málaga en El Sardinero este sábado. Antes de que el espectáculo del fútbol comience, los ultras de uno y otro equipo han protagonizado una vergonzosa batalla campal.
No es la primera vez ni tampoco la última que este tipo de indeseables aprovechan bien el fútbol u otro deporte para pegarse. En Santander, facciones ultras de Racing y Málaga se han citado para ello. Se ha informado que estos grupos eran, presuntamente, Juventudes Verdiblancas y Frente Bokerón, pero tanto uno como otro han desmentido haber participado en la multitudinaria pelea.
Pura violencia en plena calle, con lanzamientos de objetos, combates cuerpo a cuerpo y también usando armas contundentes. Según la Delegación del Gobierno de Cantabria, a la pelea acudieron medio centenar de radicales de ambos equipos. Esta tuvo lugar en el parque infantil de Piquío tras "quedar por redes sociales para agredirse".
La batalla campal, según la citada información, se saldó sin heridos, pero con detenidos. "Se han juntado en la zona de Piquío, pero en menos de un minuto la Policía Nacional ha neutralizado la situación, con la inmediata presencia de unidades de Intervención Policial y de Prevención y Reacción, las UIP y UPR, así como unidades de Seguridad Ciudadana y de la Brigada Provincial de Información", ha afirmado en un comunicado la delegada del Gobierno, Ainoa Quiñones.
Dispositivo policial
Pese a no estar declarado de alto riesgo el partido entre Racing y Málaga, un importante dispositivo policial se desplegó por Santander ante las amenazas vertidas en las redes sociales. Ya desde las 7:30 de la mañana, la Policía Nacional estaba preparada para lo que se avecinaba.
Controles en los principales accesos de la ciudad (S-10, S-20 y las nacionales N-623 y N-611) para estar al tanto de los aficionados que llegaban a la capital de Cantabria, "muchos de ellos ultras, que llegaban desde Málaga y de alguna otra afición de equipos que se unían a ellos".
La delegada del Gobierno ha condenado "las imágenes lamentables protagonizadas por quienes se consideran aficionados deportivos cuando lo que hacen no representa ni al fútbol ni al deporte, sino de la violencia gratuita y que empaña la imagen de los verdaderos aficionados".
"Tanto estos aficionados ultras como los del Racing se habían citado por redes para pegarse, algo que sabían en la Policía Nacional gracias al trabajo de los servicios de información, lo que ha permitido que las unidades policiales hayan actuado rápidamente", ha agregado Ainoa Quiñones.
La delegada ha apuntado, además, que la actuación de los radicales lo único que hace es empañar la imagen del Racing de Santander en su regreso a Segunda División: "Ambos grupos de aficionados radicales, tanto los que venían de fuera como los del propio Racing, se habían citado para pegarse. Esto no es representativo del fútbol ni del deporte, sino situaciones violentas provocadas por grupos radicales tanto de fuera como de nuestra propia ciudad. Estos aficionados radicales del Racing estén empañando la imagen de su club en este año que ha ascendido a Segunda".
"La afición del Racing vivió hace unos meses con orgullo e ilusión la subida del equipo a Segunda División, y creo que lo que menos querían y esperaban es que unos pocos violentos ensuciaran la imagen del club y los valores del deporte", ha añadido después de que estos actos ante los radicales del Málaga se sumen a los ya protagonizados contra los del Oviedo. "Tenemos que acabar con la imagen que provocan estas personas violentas y, para ellos, es necesaria la colaboración de todos", ha sentenciado.