Maria Sole Ferrieri Caputi (Livorno, 1990) ha escrito una nueva página en la historia de la Serie A. La árbitro ha sido la primera mujer en dirigir un encuentro de la Primera División de Italia. Sigue el camino que otras abrieron al máximo nivel, como es el caso de Stéphanie Frappart, en Francia, y Bibiana Steinhaus, en Alemania.
El mundo del fútbol siempre ha estado por dominado por los hombres, sin embargo, la tendencia va cambiando poco a poco. Primero, el fútbol femenino ha ido cogiendo relevancia y cada vez tiene más visibilidad. Algo que no sucede tanto con los árbitros. Muy pocas son las mujeres que tienen la oportunidad de dirigir partidos al más alto nivel.
Un muro que ha derribado Caputi en la liga italiana. Otra de las denominadas Grandes Ligas se une a la nómina de las que ya incluye a una mujer más dentro de su organigrama. Francia y Alemania son las otras dos que ya han apostado por ellas al primerísimo nivel.
"Al ser la primera en hacer algo hay cargas y honores. Hoy tuve un poco más de tensión, pero luego, en el campo, hice mi trabajo como siempre. Pero es lindo que se hable del tema, puede llevar a otras mujeres a seguir mi camino", reflexionaba tras el Salernitana - Sassuolo.
Y se mostró muy sincera al hablar del avance conseguido. Incluso antes del partido. "Prefiero que me llamen árbitro a árbitra. Cuando me dicen árbitra es porque quieren enfatizar que soy mujer. Creo que cuando ya no haya necesidad de subrayarlo, entonces significará que realmente habrá igualdad", expresaba antes de afrontar su primer gran reto.
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Fugaz ascenso
Lo que muchos tardan en construir años, Ferreiri Caputi lo ha construido en apenas un puñado de años. Su primera oportunidad la tuvo en 2015, a los 25 años, dio el salto a la Serie D. Siete años para llegar a la Serie A y seis para dirigir a un equipo de la primera división.
La pasada temporada ya se ganó a pulso la oportunidad de poder dirigir al Cagliari en la Copa. A finales de la 2021/2022, la Federación italiana ya apuntó que una mujer daría el gran salto y todos los ojos se pusieron en Ferreiri. No defraudaron, ella fue la elegida para estrenarse por todo lo alto en la octava jornada. Una meteórica trayectoria que la instaura como árbitro de primer nivel.
Esta graduada en Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales por la Universidad de Pisa y en Sociología por la Universidad de Florencia tuvo que cambiar el balón por el silbato cuando todavía se encontraba en la adolescencia debido a la presión de su madre. Y sin embargo, lo suyo fue flechazo con el arbitraje.
"De niña quería jugar al fútbol, pero mi madre no quería. Eran otros tiempos, una niña corriendo detrás de una pelota estaba mal visto. Afortunadamente, hoy es diferente. A los dieciséis me inscribí en el curso de árbitros de Livorno. Amor a primera vista", recalcó en el Corriere della Sera.
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A partir de este verano tendrá la oportunidad de dirigir partidos en el Mundial sub-20 que se disputará en la India. Una nueva oportunidad sumar experiencia a nivel internacional y acumular minutos sobre el césped a la espera de retos aún más grandes.
Frappart y Steinhaus
Dos de las árbitros referentes en el panorama son Stéphanie Frappart y Bibiana Steinhaus. La francesa es la colegiada más representativa dentro del fútbol. Completamente instaurada al máximo nivel, Frappart dio el salto a la Ligue 1 en 2019 teniendo el honor de dirigir el Amiens - Estrasburgo.
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A partir de ese momento, su presencia ha ido aumentando cada vez más hasta ser imprescindible tanto el panorama nacional como internacional, arbitrando partidos en Francia o en las competiciones de la UEFA. Ha sido la primera mujer en estar en una final europea masculina, ya que formó parte del equipo de Cuneyt Cakir en la Supercopa de Europa de 2019. Además, fue también la primera en dirigir un encuentro de la Champions, estrenándose en 2020 con un Juventus - Dinamo de Kiev. Toda una referencia en el sector y una de las mejores del mundo en lo suyo, el arbitraje.
"Siempre ha sido mi sueño dirigir en la Bundesliga. Me causa mucha alegría alcanzar esta meta y es una confirmación del duro trabajo y el arduo camino que he recorrido hasta aquí", eran las palabras de Bibiana Steinhaus antes de estrenarse en un Werder Bremen - Hertha de Berlín. Unos términos que reflejan la ardua tarea que ha tenido por delante hasta llegar a la élite.
Pese a estar retirada del máximo nivel, Steinhaus se convirtió en 2017 en una de las grandes figuras del arbitraje femenino. Su llegada a la Bundesliga la convirtió en todo un fenómeno de masas. Se retiró con un total de 23 encuentro dirigidos en la máxima competición alemana y el reconocimiento de ser una de las primeras mujeres que rompía esa barrera dentro de un terreno de futbol.
En España, buscan la oportunidad
El fútbol español todavía no ha dado ese pequeño gran paso de nombrar a una mujer árbitro principal en un encuentro de fútbol. Habitualmente, si están presentes en cada jornada. De una manera u otra, las féminas se van haciendo un hueco, por pequeño que sea, entre los colegiados de Primera División.
La primera pionera en el arbitraje español fue Carolina Doménech en 1999. Por aquel entonces ya rompió las barreras y fue la cuarta árbitro de un Espanyol - Deportivo. Una situación que abrió el camino a las grandes protagonistas de la actualidad: Marta de Huerta de Aza y Guadalupe Porras.
Ambas ya saben lo que es compartir cuarteto arbitral. Sucedió el 3 de octubre de 2021 en el Getafe - Real Sociedad correspondiente a la octava jornada de LaLiga. Porras Ayuso desarrolló las funciones de asistente y Huerta de Aza estuvo como cuarto árbitro.
Entre las dos, buscan el momento de esa ansiada oportunidad que les permita dirigirir un partido de primer nivel. La propia Huerta de Aza es colegiada en Primera RFEF, la tercera categoría del fútbol español. Y Guadalupe Porras también escribió una página más para nuestro país al estar presente esta misma temporada en un partido de Champions League. Acompañó a Mateu Lahoz como asistente en el Liverpool - Nápoles.