La vigésima jornada de la Premier League dejó en Inglaterra un gran partido con una rivalidad histórica dentro de una misma ciudad. Manchester United y Manchester City se vieron las caras en Old Trafford en un choque que tuvo goles, emoción y sobre todo polémica en uno de los dos tantos que le dieron la victoria a los red devils. Algo, que dejó a Pep Guardiola con un gran cabreo.
Los de Erik Ten Hag vencieron por 2-1 con remontada incluida, pero su primer gol, el que abrió el camino del triunfo y que supuso el empate en aquel momento, levantó muchas críticas en el bando citizen. Los visitantes reclamaron fuera de juego de Marcus Rashford antes de que Bruno Fernandes definiera y batiera en el mano a mano al guardameta Ederson.
La acción nació en la banda derecha. Un buen pase de Casemiro a la espalda de la defensa del Manchester City parecía encontrar la carrera de Marcus Rashford. En efecto, el delantero inglés corrió hacia el balón estando en fuera de juego, dudó en si tocar el balón y despistó a la defensa visitante. Sin embargo, el ariete no llegó a contactar con el esférico y, a última hora, vio la llegada desde segunda línea de Bruno Fernandes, a quien le dejó la responsabilidad de finalizar la jugada.
En el uno contra uno, el centrocampista portugués batió a Ederson con calidad ante la perplejidad de la defensa del Manchester City. De hecho, el juez de línea anuló en un primer momento este gol al interpretar que Rashford había influido en la jugada y que por lo tanto era fuera de juego, pero tras la deliberación con el colegiado se decidió dar validez a este tanto.
El cabreo de Guardiola
Finalmente, el partido terminó cayendo del lado del Manchester United, ya que los red devils completaron la remontada con el posterior gol del propio Marcus Rashford apenas cuatro minutos más tarde. Esto, dejó con un muy mal sabor de boca a toda la expedición del Manchester City, que se vio perjudicada por el gol del empate, y Pep Guardiola tiró de ironía en unas declaraciones posteriores.
"No me importa la Premier League, no me importa la Carabao Cup. Ya no las podemos ganar, pero ya hemos ganado mucho, así que no es un problema", afirmó el técnico catalán. Durante la semana, el City cayó ante el Southampton en la Carabao Cup en una de las grandes sorpresas del fútbol inglés.
Guardiola quiso dejar claro que, para él, era fuera de juego el gol del empate obra de Bruno Fernandes: "Rashford está en fuera de juego, Bruno Fernandes no. Rashford distrajo a nuestro portero y a nuestros defensas, así que es lo que es. Sabemos dónde jugamos. Es difícil para los árbitros en estos estadios", completó.
Aunque Pep Guardiola afirme que ya no tiene opciones de ganar la Premier League, lo cierto es que el Manchester City se mantiene todavía a cinco puntos del Arsenal, líder, y lo hace en la segunda posición. Es cierto que los gunners tienen un partido menos disputado, el que jugarán este domingo ante el Tottenham, pero aún queda mucho campeonato por delante.