Por qué todos los caminos conducen a Albert Soler: "El hombre de las cloacas del deporte"

Su salida del CSD estuvo marcada también por la polémica. A pesar de que pactó con José Manuel Franco un cese para buscar nuevas metas profesionales, lo cierto es que ya nadie en el Gobierno confiaba en Albert Soler. Una extraña alianza con Javier Tebas y la publicación de unas grabaciones habían desenmascarado al "hombre de las cloacas del deporte", según le define un antiguo colaborador suyo a este periódico. 

A principio de siglo Soler se convirtió en la persona fuerte del PSC para el deporte. En 2013 soñó con presidir la ACB, pero el veto del Real Madrid lo impidió, y en 2021 formó parte de un plan para inhabilitar a Luis Rubiales y erigirse como presidente de la gestora de la RFEF. "Albert siempre quería más, su ambición es desmedida".

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Soler, como director de las secciones profesionales en la era Bartomeu, era sabedor de que se estaba pagando al vicepresidente de los árbitros con dinero del club. Es decir, apoyó esa decisión y después ocupó un importante puesto en un órgano institucional y regulador del deporte español como es el CSD. Además, sus constantes intromisiones durante la negociación de la nueva Ley del Deporte colocaron en más de una ocasión en una peligrosa posición a José Manuel Franco y al Gobierno. 

Lobbista y su relación con Tebas

Tras su salida del CSD, Soler intentó sin éxito buscar un nuevo puesto en el deporte español. Se le habían cerrado todas las puertas por sus "peligrosas alianzas" en los últimos tiempos. Al final fue un viejo conocido en el PSOE, José Blanco, el que salió al rescate del exdirectivo del Barcelona y del CSD. 

El exministro socialista es socio fundador de Acento, la consultora y lobby que preside Alfonso Alonso, exministro del PP y alcalde Vitoria durante ocho años. Blanco fichó a Albert Soler en enero para crear una nueva línea de negocio en la industria del deporte que liderara el exdirectivo del FC Barcelona. 

La nueva misión de Soler en Acento estaría muy ligada a un viejo conocido suyo, Javier Tebas. Según confirman diversas fuentes del mundo del fútbol a EL ESPAÑOL, LaLiga trabaja con el lobby Acento "en diversos temas de public affairs". De esta forma, Soler consigue cerrar el círculo tras su salida del CSD para continuar colaborando con Tebas, aunque ahora desde otro puesto y con otra labor diferente. 

Albert Soler, a la derecha de la imagen, en un acto junto a Josep Maria Bartomeu FC Barcelona

La estrecha relación entre Albert Soler y Javier Tebas queda demostrada en unas grabaciones publicadas por Ok Diario en las que Gerardo González Otero, antiguo candidato a la presidencia a la RFEF, asegura al presidente de LaLiga que "todo está armado con Albert" y que solo falta "el empuje". 

El plan, siempre según esas grabaciones e informaciones, era que Albert Soler convenciera a José Manuel Franco para inhabilitar a Luis Rubiales como presidente de la RFEF a través del Tribunal Administrativo del Deporte. En el PSOE ya hacía tiempo que desconfiaban de Soler por sus "posiciones cercanas" a LaLiga y la supuesta conspiración no llegó a buen puerto. 

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El papel de Albert Soler en esta trama era "muy importante", según aseguran diversas fuentes del mundo de la política y del deporte. El anhelo del exdirectivo del Barcelona mientras el club pagaba al vicepresidente de los árbitros Enríquez Negreira fue ocupar la presidencia de la gestora de la RFEF si se conseguía que Rubiales cayera. 

"Soler se mueve a la perfección en las cloacas del deporte". "Todos los caminos siempre llevan a Soler". Estas son solo algunas de las frases de una de las personas que compartía reuniones hasta hace poco con el exdirector general de deportes del CSD. Su perfil político le ayudó a encontrar siempre acomodo desde que iniciara su carrera en 1999 como director de deportes del Ayuntamiento del Barcelona.

En todas las grandes polémicas del deporte español durante los últimos años está el nombre de Albert Soler, pero siempre como actor secundario o en la sombra. Los pagos a Negreira, la nueva Ley del Deporte o la creación de la Liga Femenina de Fútbol son solo algunos ejemplos de los últimos tiempos.

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En la negociación para la creación de la ahora llamada Liga-F, Soler ya chocó de lleno con José Manuel Franco. El, por aquel entonces, director general de deportes intentó sin éxito que la presidencia de la Liga-F recayera en una "conocida exjugadora del FC Barcelona". Siempre con los postulados de LaLiga de Javier Tebas por bandera, Soler chocó de lleno con sus compañeros en el CSD.

Antes de promover la inhabilitación de Luis Rubiales, Soler desempeñó un papel de "agente doble". Mantuvo una buena relación con la RFEF hasta que se descubrió su cercanía a Javier Tebas. "Solo un superviviente nato como Soler es capaz de hacer ese juego", indican fuentes del Fútbol Club Barcelona a este periódico.

La desconfianza de Laporta

Soler salió del club azulgrana cuando Joan Laporta ganó las elecciones en 2021. De hecho, en la actual junta directiva siempre se ha desconfiado de la figura de Albert Soler, al que ven más como un enemigo que como un compañero de amor por el Barcelona. 

En la actualidad, Laporta mantiene varios frentes abiertos con Tebas por la Superliga, CVC, la prohibición de inscribir jugadores... Desde el club señalan que temen que "todo lo que sabe Albert Soler lo sepa LaLiga". Es decir, que la información confidencial que conoce el exdirector de deportes profesionales del FC Barcelona acabe siendo un arma usada contra sus intereses. 

Albert Soler, en un acto durante su época en el CSD EFE

Albert Soler conocía perfectamente los planes de la Superliga, al igual que los pagos a Enríquez Negreira. Por estos últimos fue interrogado por la Fiscalía de Barcelona y el Gobierno 'celebra' que no haya sucedido durante su estancia en el CSD, ya que hubiera provocado un gran daño a la institución y al Ejecutivo de Pedro Sánchez. 

El Gobierno y el CSD salvaron en parte el escándalo, aunque Albert Soler haya ocupado durante dos años el puesto de director general de deportes del CSD después de que aceptara los pagos del FC Barcelona al vicepresidente de los árbitros. Albert Soler fue juez y parte, aunque no al mismo tiempo. "El hombre de las cloacas" que sale en todos los capítulos más negros de la historia del deporte español.