Hacienda pide investigar si otros directivos del Barça cobraron por facilitar los contratos con Negreira

Así lo desliza la Agencia Tributaria, dependiente de este ministerio, en un informe incluido en el sumario del caso Negreira, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL. En esta causa judicial, un juzgado barcelonés investiga los pagos efectuados por el Barça a dos empresas de Negreira, bajo la sospecha —así lo cree la Fiscalía— de que estos movimientos tenían el objetivo de conseguir árbitros favorables al club azulgrana.

El informe de Hacienda señala que el FC Barcelona efectuó estos pagos —cerca de 2,95 millones de euros entre 2014 y 2018, aunque hubo transacciones previas, que habrían prescrito— a lo largo de distintas presidencias del club. Por ello, insta a investigar si existieron cargos del Barça que formaran parte de la directiva "de forma constante" y que pudiesen "haber facilitado dichos contratos" o, incluso, "haberse beneficiado de ellos vía retornos en efectivo".

[La Fiscalía cree que el Barça pagó a Negreira para obtener árbitros que "favorecieran al club"]

Es decir, que, hipotéticamente, Negreira hubiera abonado a algún cargo del Barça mordidas por haberle facilitado sus negocios con el club. Concretamente, el informe señala al ya fallecido Josep Contreras, que fue directivo durante las presidencias de José Luis Núñez, Joan Gaspart y Josep María Bartomeu.

Se trata de una cuestión que Hacienda no investigó, "al quedar fuera del ámbito tributario". Pero, a ojos del Ministerio, es un asunto que "pudiera ser relevante respecto a otro tipo de irregularidades".

Cuando la Inspección de Hacienda interrogó a Negreira, le preguntó si alguna vez había devuelto a alguien una parte de lo que cobraba del Barça. El exárbitro respondió que no, que lo destinaba a su empresa Dasnil 95 SL o a sí mismo.

Por el momento, el Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona investiga, tras una denuncia de la Fiscalía Provincial, a Negreira, al Barça, a sus expresidentes Sandro Rosell y Josep María Bartomeu y a otros dos altos cargos del club: Óscar Grau, exdirector ejecutivo del Barça, y Albert Soler, antiguo director de deportes profesionales.

La juez ya ha ordenado que la Guardia Civil "lleve a cabo las diligencias de investigación necesarias" para determinar el motivo por el que el FC Barcelona pagó a las empresas Dasnil 95 SL y Nilsad SCP, propiedad de Negreira, así como el destino que dichas mercantiles dieron a los fondos.

El Juzgado investiga un delito continuado de corrupción entre particulares en el ámbito deportivo, un delito continuado de administración desleal y un delito continuado de falsedad en documento mercantil. 

En su informe, Hacienda analiza la actividad de, entre otras, estas dos compañías. Por su parte, la Fiscalía subrayaba en su denuncia que las cuentas de las dos empresas "se nutrían, prácticamente en su totalidad, de los ingresos procedentes del FC Barcelona". 

Negreira fue árbitro profesional desde el año 1975 hasta 1992 y, después, vicepresidente del CTA desde 1994 hasta el 2018. Interrogado por la Inspección de Hacienda, indicó que los servicios que prestaba al FC Barcelona incluían ir a ver los partidos y valorar el arbitraje, ya que el club blaugrana consideraba que, en ocasiones, era perjudicado por la actuación arbitral. También proporcionaba "asesoramiento técnico" y le garantizaba al Barça "que todo fuera neutral" con respecto a la labor de los colegiados.

'Caso Negreira'

El pasado 10 de marzo, la Fiscalía Provincial de Barcelona denunció al FC Barcelona, a sus expresidentes Josep María Bartomeu y Sandro Rosell, a Enríquez Negreira y a otros dos ex altos cargos del Barça: Óscar Grau, exdirector ejecutivo del Barça, y Albert Soler, antiguo director de deportes profesionales.

El Ministerio Público sostiene que el club pagó a Negreira, que era vicepresidente del CTA, con el objetivo de que los árbitros fueran favorables al conjunto azulgrana.

"A través de los presidentes [del Barça] Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, el FC Barcelona alcanzó y mantuvo un acuerdo verbal estrictamente confidencial con el denunciado José María Enríquez Negreira, a fin de que, en su calidad de vicepresidente del CTA y a cambio de dinero, realizase actuaciones tendentes a favorecer al FC Barcelona en la toma de decisiones de los árbitros en los partidos que disputase el club", concluye el escrito de la Fiscalía barcelonesa.

Estos pagos se habrían efectuado a través de Dasnil 95 SL y Nilsad SCP, dos empresas de Negreira, que habría girado facturas a la entidad deportiva sin que, a juicio de la Fiscalía, "las mismas respondieran a ninguna prestación o servicios de asesoramiento técnico real".

Enríquez Negreira, dentro de sus funciones como número dos de los árbitros bajo la presidencia de Sánchez Arminio en el CTA y de Ángel María Villar en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), participaba en las evaluaciones a los colegiados tras cada actuación.

Aunque la denuncia de la Fiscalía de Barcelona se centra en los pagos entre 2014 y 2018, existe constancia de que estos movimientos de dinero se habrían producido desde principios de siglo, pero, de ser delictivos, ya habrían prescrito. Los vicepresidentes del Comité Técnico de Árbitros, además, forman parte de la Comisión de Disciplina y Méritos de la entidad.