José Mourinho se convirtió en uno de los nombres en la última jornada de la Serie A. El terreno de juego enfrentaba a la Roma contra la Sampdoria. Un duelo de viejos conocidos pues el técnico portugués se reencontraba sobre el césped con uno de los que fue su pupilo en el Inter de Milán.

En el banquillo contrario al del portugués se sentaba Dejan Stankovic, ahora técnico de la Sampdoria. Sin embargo, ese reencuentro estuvo manchado por una serie de cánticos proferidos desde la grada del Olímpico de Roma hacía el serbio. Esa desagradable situación hizo que Mourinho tuviese que intervenir.

Durante un instante del partido, la afición local lanzó una serie de improperios contra el técnico rival. Fue en el minuto 52 de la segunda parte, cuando tras la salida Stankovic a dar una serie de órdenes, cuando la grada giallorossa empezó a dirigirse de manera despectiva hacia el técnico de la Sampdoria.

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En ese momento, Mourinho, observando la magnitud del asunto, se levantó de su asiento y empezó a señalar a la grada que mantuviese silencio, evitando así que siguiesen sucediéndose los insultos racistas contra Stankovic. Todo se originó por los orígenes del serbio, que están relacionados con los gitanos.

Un acto de respeto para defender al que fue uno de los futbolistas que formó parte de su gloriosa etapa en el Inter de Milán. Con él, José Mourinho logró alzarse con cinco títulos en el cuadro italiano, destacando entre ellos la Champions League o las dos Serie A conseguidas en dos temporadas.

Además, tras la rueda de prensa, Mourinho quiso dedicarle unas palabras a su amigo. "Lo hice por un gran hombre y un gran amigo. Tiene hijos y una familia y eso no es bonito. Nuestros aficionados son geniales, pero mis amigos no se tocan", recalcó tras su defensa a Stankovic en el terreno de juego, demostrando que la amistad sigue estando muy presente entre ellos.

A ellas quiso responder Stankovic, que le restó importancia a lo ocurrido y con las cuales quiso agradecer a Mourinho su intervención. "Estoy orgulloso de serlo. Gracias a Mourinho por aplacarles pero sabe que eso a mí no me afecta", declaró.

Victoria de Mou

Pese a ser amigos, José Mourinho no dejó escapar los tres puntos del Olímpico de Roma. El técnico portugués se llevó para su zurrón una preciada victoria por 3-0 que les permite igualar al Inter de Milán en la cuarta plaza. El cuadro de la capital de Italia alcanzó los 50 puntos y sigue luchando por disputar la Champions League la próxima temporada.

Los goles del triunfo fueron marcados por Georgino Wijnaldum, a los quince minutos de la segunda mitad, Paulo Dybala, de penalti a dos minutos del final, y de Stephan El Shaarawy en el último instante.