La selección española de fútbol tiene un nuevo e importante compromiso en su calendario. Luis de la Fuente y los 23 convocados se enfrentan a Italia este jueves (20:45 hora peninsular) en las semifinales de la UEFA Nations League. Un partido donde ambos combinados se juegan todas sus opciones para continuar en la lucha por el título.
El partido se presenta como la oportunidad perfecta de Luis de la Fuente de dar un giro de timón tras lo vivido en sus dos primeros partidos al frente de la Selección. El inicio de su andadura con España comenzó de la manera más descafeinada posible, sumando una victoria frente a Noruega y una derrota frente a Escocia en la clasificación para el Mundial de 2026.
Para ello, la UEFA Nations League aparece en el horizonte con la opción de darle un título al combinado nacional. Hace más de once años que no logran un triunfo y, con Luis de la Fuente al mando, esa dinámica puede cambiar. El seleccionador se ha mostrado muy partidario de centrar todos sus esfuerzos en los dos partidos que le restan, sabedor de que todos los ojos están puestos en él, y para ello ha decidido llevarse una serie de futbolistas más experimentados en este tipo de encuentros.
El técnico español sabe que necesita revertir la imagen dada frente a Noruega y Escocia. Frente a los primeros sumó una victoria cimentada en los minutos finales gracias al acierto de Joselu, una de sus apuestas en el ataque, y contra los segundos cayó derrotado de manera clara frente a un equipo de menor entidad.
Es por ello por lo que el compromiso frente a Italia, una selección que mira de tú a tú a España, aclarará las expectativas que hay puestas en la Selección. Esto se traduce en la confirmación del proyecto que lleva el nombre y la apuesta personal de Luis de la Fuente.
Luis de la Fuente, durante un entrenamiento con España junto a Marco Asensio y Ansu Fati.
Italia, un 'clásico'
Para examinar a fondo a Luis de la Fuente, Italia será su primer rival en su camino por alzarse con la UEFA Nations League. El conjunto transalpino llega con la ambición de seguir sumando títulos en su haber y se vuelven a cruzar con un conocido habitual de este tipo de partidos.
Hace cerca dos años que las dos selecciones no se enfrentan sobre el terreno de juego, sin embargo, el último recuerdo de este 'clásico' no es del agrado de España. Cruzaron sus caminos en Eurocopa de 2020 en las semifinales del torneo. Allí un agónico partido para los dos equipos acabó con la victoria para los transalpinos en una infartante tanda de penaltis.
La historia acabó con Italia haciéndose con el triunfo en la Eurocopa y apartando a España de volver a tocar la gloria. Sin embargo, las dos selecciones se han enfrentado a momentos marcados por la desgracia en sus últimos torneos, lo que ha provocado que tengan ganas de revalorizarse sobre el terreno de juego.
Por un lado, España fracasó en el Mundial de Qatar 2022 y no paso de los octavos de final tras caer en los penaltis frente a Marruecos, la gran revelación del torneo. Los pupilos de Luis Enrique, seleccionador en aquel momento, llegaban con muchas esperanzas y acabaron dándose de bruces con la realidad.
Un episodio mucho más cruento sufrió Italia. Los transalpinos no consiguieron siquiera estar en Qatar el pasado mes de diciembre. Una traumática derrota frente a Macedonia del Norte, rival notablemente inferior, por la mínima en la repesca les dejó fuera de la Copa del Mundo.
Ferran Torres celebra su gol a Italia
Lo cierto es que este 'clásico' de selecciones ha hecho que España e Italia se vean las caras hasta en 39 ocasiones, 12 triunfos para los de Luis de la Fuente, 11 victorias para los de Maldini y 16 empates, siendo uno de los partidos más repetidos. En la última década se han enfrentado en las rondas finales de los torneos como bien ejemplifican esas semifinales de la pasada Eurocopa.
Algunos de los últimos, aparte del mencionado, han sido las semifinales de la Copa Confederaciones, otras semifinales de la UEFA Nations League, la final de la Eurocopa de 2012 o los octavos de la Eurocopa de 2016. Los tres primeros acabaron con victoria para España y el otro con triunfo para Italia. Es decir, tres veces se impuso la Selección por dos de su rival a los que hay que añadir un empate en un amistoso. Igualdad casi absoluta.
Ahora los dos equipos buscan recuperar su prestigio a nivel internacional con la intención de coronarse como campeones de la UEFA Nations League. Solo podrá quedar uno, pero ni eso les asegura salir triunfadores de la cita en Países Bajos.
Obligación de ganar
"Esta lista, más que nunca, está pensada para ganar. En dos partidos podemos ganar un título. La respuesta está clara", eran las primeras palabras que emitía Luis de la Fuente tras hacerse pública su lista para los dos partidos de la Nations League. Dos compromisos importantes para el devenir de la Selección.
Su última lista apostaba por jugadores más veteranos que no habían estado en la anterior. Nombres como Jordi Alba, Jesús Navas, Sergio Canales o Rodrigo Moreno. A eso hay que añadirle otros presentes como Nacho Fernández, Dani Carvajal o Joselu. Todos ellos superan la treintena ampliamente, lo que chocó con las ideas de un entrenador que había crecido formándose en las categorías inferiores de la Selección.
Dani Carvajal y Nacho Fernández, dos de los veteranos de la Selección, durante un entrenamiento.
Sin embargo, el grueso de todos ellos ha estado acostumbrado a lidiar con situaciones críticas a lo largo de su carrera, debido a su experiencia en los clubes, y muchos saben lo que es jugarse los partidos a todo o nada. Algo a lo que no han podido enfrentarse todavía la enorme mayoría de las promesas españolas.
Por ese motivo, De la Fuente se encargó de transmitir en la rueda de prensa frente a Italia la importancia del duelo de semifinales. "No pensamos en perder, pensamos en llegar a la final y nada más. No hay día después. Lo veo como si es mi último partido. La única manera de afrontarlo con ganas es sabiendo que es el último", insistió.
A pesar de reconocer "que no se puede exigir ganar", el seleccionador español ha querido refrendar una y otra vez su motivación por llevar al título al combinado nacional. Una apuesta, que de salir ganadora, le asentaría en el cargo y le daría poder para disfrutar de una dulce andadura en el banquillo.