Hace unos pocos días, antes de que la Selección española viajara hasta los Países Bajos para medirse a Italia en la semifinal de la Nations League, Joselu concedía una entrevista a EL ESPAÑOL en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. Preguntado sobre cómo veía que nadie tuviera mejor promedio goleador que él hasta el momento (2 goles en 2 partidos), soltaba una carcajada sincera. "Lo que intento es hacer mi trabajo, que son goles".
A la vista de los acontecimientos está que su trabajo lo sigue haciendo a la perfección cuando se enfunda la camiseta de España porque gracias a su oportunismo la Selección está en la final de la Nations League. Joselu apareció para desatascar en el momento más crítico un partido que se marchaba a la prórroga, así que evitó a todos 30 minutos más de esfuerzo para mantener vivo el sueño de que el combinado nacional vuelva a levantar un título.
Si en su debut contra Noruega hace tres meses le bastaron dos minutos para anotar dos goles y dejar con la boca abierta a todo el mundo, en esta ocasión necesitó poco más de 4 minutos para volver a dejar claro que tiene gol. Entró al terreno de juego en el minuto 84 en sustitución de Morata y en el 88 ya había marcado. Lo que para otros es un suplicio, ver puerta, para él es casi un juego de niños.
Joselu celebra el gol de la victoria ante Italia.
Gracias a ese gol España sueña con volver a ganar un título 11 años después. La última vez que saboreó las mieles del éxito fue en la Eurocopa 2012, y desde entonces el equipo nacional atraviesa un largo camino por el desierto en el que tan sólo ha llegado a estar en otra final de la Nations League hace dos años. Pero aquí está ahora Joselu para cambiar la historia.
El gol que España necesita
Hace tiempo que España está en busca de un delantero que marque las diferencias. Para el recuerdo ya queda aquel ataque que en su día formaron David Villa y Fernando Torres y, seguramente desde entonces, la Selección no haya conseguido encontrar a un hombre de garantías que asegure goles con regularidad.
Es cierto que Álvaro Morata ha aportado más que nadie en los últimos años en este aspecto. De hecho, el delantero del Atlético de Madrid es ya uno de los máximos goleadores de la historia del combinado nacional, pero en muchas ocasiones se le ha seguido achacando falta de puntería y también de continuidad como para fiarse de él al 100% en un gran torneo.
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Por eso, la irrupción de Joselu ha caído en España como agua de mayo. El delantero del Espanyol fue una apuesta firme y clara de Luis de la Fuente en su anterior lista y las cosas le salieron a pedir de boca. Debutó contra Noruega en un partido de la clasificación para la Eurocopa 2024 con dos goles en tan sólo dos minutos, y eso le valió innumerables halagos.
Él mismo comentó en la entrevista a EL ESPAÑOL que su gran objetivo durante los últimos tres meses ha sido trabajar duro y hacer goles para volver a ser llamado por la Selección, así que obtuvo su recompensa. Desde luego que no ha desperdiciado su nueva oportunidad porque se volvió a convertir en un hombre clave para el combinado nacional.
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Parece que a Joselu todavía le falta algo más para ser el delantero titular de España pero por falta de méritos no será. Tres goles en tres encuentros, todos ellos importantes, le convierten en el delantero español más en forma del momento y en el que más responsabilidades se pueden descargar.
Una explosión tardía
En una época en la que el deporte está cada vez más dominado por los jóvenes talentos que surgen, aún queda alguna rara avis como es el caso de Joselu. Debutar con 32 años con la selección nacional de tu país no es algo que se vea muy a menudo, pero tantos años de duro trabajo han desembocado en la mayor recompensa de toda la carrera deportiva de este delantero.
Terminó La Liga como el tercer máximo goleador, a tan sólo 3 tantos de Karim Benzema, y siendo el máximo artillero nacional. Unos números así no podían tener otro desenlace que el de ser llamado para jugar con España, aunque Joselu es mucho más que unas frías cifras.
Joselu celebra su gol con el puño cerrado.
El delantero, sobre el que el Real Madrid tiene un gran interés de cara a la temporada que viene, tiene unas cualidades innatas para el gol y muy distintas con respecto al juego que ha venido desempeñando España en los últimos años. Con el estilo de toque, el perfil de ariete alto, corpulento y espigado como Joselu estaba en peligro de extinción, pero Luis de la Fuente ha demostrado ser inteligente y aprovechar todos los recursos que tiene a su alcance.
Por eso el todavía futbolista del Espanyol se ha convertido en una pieza importante para España, porque sus características le permiten estar en el área y aprovechar su instinto en beneficio del equipo. Ahora sueña con levantar su primer título con la Selección a sus 33 años, algo que no podría haber ni siquiera soñado hace unos pocos meses.