Croacia, el último rival de España por el título: una Nations League para despedir a gran generación

Croacia tendrá una oportunidad de oro para sumar el primer título de su historia en la UEFA Nations League. El combinado balcánico tiene por delante un duro partido frente a España, que busca romper su sequía de trofeos, en una final que se presupone muy ajustada por la calidad de los dos grandes equipos. Un duelo por todo lo alto en Róterdam del que sólo uno saldrá campeón.

Acostumbrada a su peculiar estilo, fiel a la resistencia, Croacia consiguió su pase a la final de la UEFA Nations League. No lo hizo sin sufrir, puesto que parece que van en sus venas esa capacidad indómita de apurar hasta el último segundo, frente a Países Bajos. Una clasificación marcada por una agónica prórroga que casi les deja fuera contra los neerlandeses.

Por delante, tienen una oportunidad única de despedir a una generación dorada. Pese a que algunos como Ivan Rakitic ya dijeron adiós, otros guerreros croatas siguen al pie del cañón. Es el caso de los Luka Modric, Ivan Perisic o Domagoj Vida. Todos ellos superan la treintena de manera holgada y su retirada de la selección está mucho más cerca que lejos.

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Por eso, ante España tendrán la ocasión de coronarse como campeones de la Nations League. Esto significa que pueden conseguir este domingo un título, algo que nunca antes ha logrado Croacia. Se han quedado muy cerca en distintas ocasiones, pero esta vez puede ser la definitiva.

Acostumbrados a dejarse la piel sobre el terreno de juego, Croacia tiene todos los ingredientes para plantarle una gran batalla a España en Róterdam este domingo. Con figuras como los mencionados Modric o Perisic y unidos a los Livakovic, Kramaric o Juranovic, el combinado balcánico se prepara para una final que puede ser histórica para ellos.

Luka Modric celebra su gol frente a Países Bajos en la semifinal. REUTERS

Veteranos a la orden del día

Croacia se ha convertido en una de las selecciones más veteranas del panorama internacional. Con Modric como principal faro del equipo a sus 37 años, el centrocampista ha sido uno de los principales estandartes del combinado balcánico. Un líder perenne que siempre ha dado la cara por los suyos.

Amparado en otros grandes veteranos como Ivan Perisic o Domagoj Vida, Croacia ha conseguido colocarse entre las mejores del mundo. Una y otra vez han rondado ese título que tanta ilusión hace a un país que ha estado marcado por su carácter irreductible, quizá fruto del crecimiento de muchos estos jugadores bajo el amparo de la guerra.

Ahora, ante sí, tienen la oportunidad de alzar un histórico título para sus vitrinas. Esto supondría el broche de oro a varios de los integrantes de la selección. Un partido que está marcado por el aroma de despedida para varios de ellos, que comienzan a ver cómo los jóvenes talentos empiezan a llamar a la puerta una y otra vez.

Sin embargo, Modric y compañía están acostumbrados a los ejercicios de resistencia cada vez que salen al campo. Un claro ejemplo de ello son sus últimos partidos y su idilio con las prórrogas. De sus diez últimos duelos de eliminación directa, siete acabaron en con el tiempo extra y cinco en tandas de penaltis. Es decir, están acostumbrados a jugar en el alambre siempre.

Por lo tanto, esta puede ser la última oportunidad para estos veteranos de estrenar las vitrinas de un país con solo 29 años de vida. Ellos son el último escollo de España, que quiere pelear con ellos por levantar la Nations League. Un duelo a todo o nada que tendrá a solo uno campeón. Y Croacia no va de farol, ya que se exigen siempre al máximo para representar ese escudo.

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El título que se les resiste

A pesar de su corta trayectoria como selección, Croacia ha tocado con la yema de sus dedos varios títulos. Siempre partiendo desde una posición alejada del favoritismo, los balcánicos han dado su mejor versión en los torneos internacionales. Algo que han refrendado en esta Nations League.

Croacia, no obstante, no ha sido capaz de tocar la gloria cada vez que le ha tocado bailar en este tipo de situaciones. Considerándose unos los mejores equipos, especialmente por su buen rendimiento en grupo, han conseguido colarse en su segunda final de la historia.

Eso sí, han sido protagonistas indiscutibles en los últimos Mundiales. En Qatar 2022 acabaron terceros tras sucumbir frente a la campeona Argentina, pero en el partido por el bronce hizo morder el polvo a la revelación de Marruecos. Y aún así dejó por el camino a otras potencias como Bélgica o Brasil, que no pudieron con ella.

Aún mejor si cabe fue su papel en Rusia 2018. Allí, los Modric, Rakitic, Mandžukic o Lovren soñaron con proclamarse campeones del mundo tras eliminar a Rusia, Inglaterra o Dinamarca. Solo Francia, con Mbappé y Griezmann a la cabeza, pudo apartarles de esa gesta espectacular. Un subcampeonato que les supo a gloria, pero del que intentarán redimirse en su siguiente final.

Modric y Mbappé, en el Mundial de 2018. REUTERS

Aunque todo comenzó hace 25 años. En el Mundial de Francia 1998 también fueron capaces de plantar cara y de poner de manifiesto la potencia de su selección. Con Davor Suker como principal líder, dejó por el camino a selecciones como Rumanía o la todopoderosa Alemania para acabar cediendo ante Francia. En el partido por el bronce, fueron superiores a Países Bajos y se alzaron con la primera de sus tres medallas en la Copa del Mundo.

Ahora, España es su último rival, su último escollo. Un duelo con aroma a despedida para varios de ellos y que, por tanto, puede suponer su último servicio para Croacia. Por tanto, será una final de la Nations League entre dos selecciones que buscan alcanzar la gloria, unos ya la han tocado y quieren recuperarla, otros quien saborearla por primera vez. Todo o nada para las dos.