Arabia Saudí se ha convertido en uno de los grandes animadores del mercado de fichajes. Su enorme capacidad financiera, respalda por el gobierno del país y por un proyecto de Estado para potenciar a los clubes, ha provocado que varios de los mejores jugadores del mundo hayan desembarcado en su liga en los últimos meses. Un claro ejemplo de ello han sido las firmas de Cristiano Ronaldo o Karim Benzema.
Hasta ahora, su modelo estaba en captar a aquellos veteranos jugadores, todavía con un altísimo caché, para reforzar su imagen de marca. Es decir, se había convertido en un retiro dorado para las estrellas, agasajados por los desorbitados salarios ofrecidos imposibles de igualar para los clubes europeos.
Tras conseguir su objetivo, a la espera de la llegada de otros como N'Golo Kanté, y fracasar en el intento de otros como Leo Messi, Sergio Busquets o Jordi Alba. Arabia Saudí ha añadido una fijación más a sus objetivos, buscando apostar por jugadores de un perfil menos destacado.
Su intención es reforzar la plantilla de sus equipos, especialmente las de los clubes más importantes como Al Nassr, Al Ittihad y Al Hilal. En su búsqueda por darle un equipo más potente a esas grandes estrellas fichadas, han decidido apostar por la llamada clase media del fútbol.
Ellos son plenamente conscientes de que los equipos no se forman solo con superestrellas, sino que hay que tener detrás un compendio de futbolistas curtidos y que puedan rendir desde un primer momento. Con ello, comenzaría a crecer el nivel competitivo de la competición doméstica y, por ende, sus resultados en la Champions asiática.
Es decir, se están centrando en reforzarse con jugadores de un perfil menos mediático, pero con sobrada y demostrada calidad. Un motivo por el que los clubes europeos han empezado a temer una desbandada de futbolista rumbo a Arabia Saudí, camelados por las insuperables ofertas de un campeonato que cada vez empieza a tomar más forma.
Peligro en Europa
Poco a poco Arabia Saudí va conformando una retahíla de jugadores de altísimo nivel. Dejando de lado a los mencionados Cristiano Ronaldo o Karim Benzema, la apuesta por esos jugadores de menos nombres pero con calidad contrastada hace que hayan puesto sus ojos en la clase media.
Uno de los grandes ejemplos es Ruben Neves. El futbolista del Wolverhampton, que estuvo muy relacionado con el Barcelona en las últimas ventanas del mercado de fichajes, pondrá rumbo a la Liga Profesional Saudí. Atrás deja a la potentísima Premier League para irse a un exótico destino y lo hace con tan solo 26 años.
El poder económico de Arabia Saudí ha propiciado que pueda haber un éxodo. Además, se dice que el Al-Hilal desembolsará hasta 55 millones de euros por Neves, una cifra que muy pocos pueden alcanzar en este mercado. Una demostración de que el dinero todo lo puede.
Sin embargo, puede no ser el único que coja un billete rumbo a Riad o Jeddah, sedes de los equipos más importantes del país. Otro de los señalados para ir para allá es Edouard Mendy, portero del Chelsea y campeón de la Champions hace un par de temporadas con los ingleses, siendo considerado el mejor portero europeo. El guardameta, capaz de tener todavía muchos años por delante de carrera, parece que también hará las maletas recientemente pasada la treintena.
Pero no se quieren quedar ahí. La Premier ha sido el lugar más jugoso que ha encontrado Arabia Saudí para invertir su dinero, ya que allí los precios son desorbitados y el reclamo publicitario es su gran valedor. Y la maquinaria ya está puesta en marcha.
De hecho, el Chelsea parece haber sido el escogido para hacer su banco de experimentos. Los de Todd Boehly necesitan vender y el país del golfo Pérsico quiere comprar. Una operación ganadora en todos los sentidos. En su radar ya están los otros compañeros de Mendy y Kanté. Pierre-Emerick Aubameyang, Kalidou Koulibaly, Romelu Lukaku, Hakim Ziyech son los que más cerca están de marcharse al fútbol árabe.
Aún así siguen poniendo sus ojos en estrellas del fútbol europeo. Es el caso de Bernardo Silva, pieza clave para Guardiola en el Manchester City en la conquista de la Champions League esta temporada. Pese a ser relacionado con otros clubes como PSG o FC Barcelona, los 'petrodólares' han comenzado a hacer su función y ya se están realizando los correspondientes cantos de sirena.
Como era de esperar, los tentáculos saudíes también le han echado el ojo al fútbol español. Acostumbrados al alto nivel en Europa de equipos como el Atlético de Madrid, FC Barcelona, Real Madrid o Sevilla, lo más normal es que tarde o temprano comenzasen a interesarse por jugadores de nuestro país.
En los últimos días, el interés por esos futbolistas de segunda línea se ha hecho más que tangible. Tras llevarse a Karim Benzema a principios de junio e intentarlo en reiteradas ocasiones con Luka Modric, que ha rechazado sus ofertas en varias ocasiones, sus objetivos ahora son otros.
Nombres como Saúl Ñíguez, William Carvalho o Ivan Rakitic han sido relacionados. Además, el otro como Samuel Umtiti, que vuelve al Barça tras su cesión al Lecce, también está en las quinielas para sucumbir ante las ofertas árabes. Un éxodo que parece que no ha hecho más que comenzar.
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Contundencia desde Arabia
Hafez Al-Medlej, jefe del Comité de márketing de la AFC y exmiembro de la Oficina Ejecutiva de la Confederación Asiática de Fútbol, ha mandado un serio aviso a Europa tras su nueva política de fichajes. El dirigente saudí reconoce que seguirán apostando por las grandes estrellas, pero que cualquier futbolista es sensible de recibir una oferta.
"Estamos sólo al principio. A partir de ahora, todos los futbolistas transferibles serán un objetivo para los clubes saudíes. La experiencia de China no tiene nada que ver con la nuestra, fue puramente marketing. Allí el fútbol no es muy popular. En Arabia tenemos un proyecto de Estado y no se limitará a cuatro grandes equipos, sino a todos. Porque la pasión de los saudíes por el fútbol no tiene límites", ha explicado en una entrevista a Koura.
Por otro lado, ha querido desmentir ese dato de que solo quieran fichar a aquellos futbolistas que estén a punto de finalizar sus carreras deportivas. Ha hecho referencia a la próxima llegada de Ruben Neves y ha apuntado a la intención de otros dos grandes llegadas.
"No fichamos a jugadores que están acabados. El Al Hilal fichará a Ruben Neves, que tiene 26 años y al que quería el Barcelona. Y Benzema llegó al Al Ittihad después de ser Balón de Oro en el Real Madrid. Esperamos que llegue Bernardo Silva, del Manchester City, y también deberíamos empezar a trabajar en el fichaje de Mohamed Salah", sentenció.