Aitana Bonmatí amplía el 'caso Rubiales' a todo "abuso de poder en una relación laboral"

Ante toda la élite del fútbol europeo, Aitana Bonmatí (Villanueva y Geltrú, 1998) alzó la voz contra Luis Rubiales y le acusó de "abuso de poder" por su beso a Hermoso. La futbolista española recogía el premio de la UEFA a mejor jugadora de la temporada y aprovechó el foco: "A Jenni y a todas las mujeres que sufren lo mismo: estamos con vosotras", dijo.

La Balón de Oro del Mundial cargó contra Rubiales: "Como sociedad no debemos permitir que se haga abuso de poder en un ámbito laboral, así como las faltas de respeto", dijo sobre la polémica. Antes Sarina Weigman, seleccionadora de Inglaterra, que se llevó el premio a mejor entrenadora por delante de Jorge Vilda, 'compartió' su galardón con las jugadoras españolas por lo ocurrido.

Las palabras de Weigman, finalista del Mundial, fueron: "Soy mujer y madre de dos hijas. Le dedico el premio a las jugadoras de España por su gran fútbol en el Mundial. En estos momentos deberían estar celebrando el título y no es así".

Las palabras que utiliza Bonmatí no son casuales. "Abuso de autoridad (o de poder)" es como refleja el Gobierno en su escrito contra Rubiales, enviado al Tribunal Administrativo del Deporte (TAD), una de las dos infracciones muy graves de las que le inculpa. Esta viene recogida en el artículo 76.1.a de la Ley del Deporte de 1990 y es por el beso en la boca a Jenni Hermoso en la entrega de las medallas.

El incumplimiento del Gobierno del plazo de la Ley del Deporte de 2022 impidió que el TAD decida sobre si hubo un "beso a la fuerza". En la nueva ley, en el protoclo de actuación frente a la violencia sexual, se recoge que "besar a la fuerza tendrá consecuencias inmediatas". Sin embargo, esta no se pudo aplicar por la inacción de José Manuel Franco, que ocupó la presidencia del CSD hasta mediados de junio, y el TAD decide sobre si existió un "abuso de autoridad" de Rubiales sobre Jenni Hermoso. 

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Mejor jugadora de Europa

Aitana es desde este jueves la mejor jugadora de Europa según la UEFA. La futbolista de 25 años se llevó el premio durante la gala celebrada en Montecarlo (Mónaco). Superó en las votaciones a Olga Carmona, su compañera en la Selección, y a la australiana Sam Kerr.

"Es una temporada que nunca olvidaré. Me gustaría compartir este premio con todas mis compañeras, juego con gente maravillosa que me hace mejor cada día. También el club y todo el staff con el que juego. Soy una privilegiada", dijo Aitana sobre su campaña.

Sigue el 2023 mágico de Aitana. Ganó en junio la Champions con el FC Barcelona, en Eindhoven (Países Bajos), y hace 11 se proclamó campeona del mundo con España, en Sídney (Australia). La FIFA ya la eligió mejor jugadora del torneo de selecciones y sigue recogiendo premios individuales por su gran temporada.

Aitana Bonmatí sucede a otra española, Alexia Putellas, que se llevó el galardón de la UEFA los dos últimos años. Continúa el dominio del fútbol español femenino, a pesar de la crisis en la RFEF que acompañó al éxito en el Mundial.