Los peores presagios se confirmaron y las pruebas médicas revelaron que Gavi no volverá a jugar ni un solo minuto más esta temporada. El Barça confirmó que el centrocampista sufre una rotura completa del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha y que además tenía también una lesión asociada al menisco externo.
Sin necesidad de dar un plazo exacto para la recuperación del futbolista, huelga decir que se perderá este curso 2023/2024 y que tan sólo algo parecido a un milagro le permitiría llegar en condiciones a la Eurocopa 2024 o a los Juegos Olímpicos del verano que viene. Un palo muy gordo para alguien imprescindible para Xavi Hernández.
Desde Barcelona se han cargado las tintas en las últimas horas contra Luis de la Fuente por no darle descanso al culé, pero lo cierto es que esta desgracia es fruto de la mala suerte y podría haberle pasado a cualquiera incluso entrenando. Para ejemplo, el de Yéremy Pino con el Villarreal.
Ahora se abre un vacío terrible en el centro del campo del Fútbol Club Barcelona. ¿Qué va a hacer Xavi sin uno de sus jugadores preferidos? ¿Va a ir el Barça al mercado de invierno para tratar de paliar la ausencia de la joven estrella? ¿Hay alguien en la plantilla con unas características similares para que no se note en exceso su ausencia?
Sea como fuere, el Barça y especialmente su entrenador van a tener que buscar alternativas. Encontrar un recambio para un perfil tan particular como el de Gavi no es tarea sencilla, pero las lesiones forman parte del fútbol y esta misma temporada ya hay otros ejemplos de roturas del cruzado que han lastrado a otros equipos de La Liga, por ejemplo el Real Madrid con Courtois y Militao. La cabeza de Xavi seguro que ya está maquinando.
Garantías en la plantilla
El agujero que va a dejar Gavi en los próximos meses se va a notar irremediablemente. Era una de las piezas insustituibles en el entramado de Xavi Hernández tal y como reflejan los números. El centrocampista había jugado hasta el momento 15 partidos y en 13 de ellos había partido como titular.
De hecho, de los 111 encuentros que acumula el de La Masía con la camiseta blaugrana, una buena parte de ellos habían sido con Xavi Hernández ya en el banquillo, una muestra de que el técnico está completamente prendado de él y de su manera de jugar al fútbol. Hasta ahora apenas se había perdido partidos por lesión, pero aquí tiene la prueba más dura de su carrera deportiva.
Lo primero que tendrá que hacer Xavi será mirar hacia su plantilla y pensar en cómo va a organizar los próximos encuentros de Liga y Champions. Por suerte, recuperará de inmediato a Frenkie de Jong, y eso le da un serio respiro porque el holandés también tiene un protagonismo capital en el juego de los catalanes.
En condiciones normales, el centro del campo a partir de ahora debería estar formado por el neerlandés acompañado de Pedri y de Gündogan. Parece un trío con garantías como para afrontar cualquier competición. De Jong ejerciendo de ancla con el excelso nivel que ha demostrado en los últimos tiempos, Pedri poniendo la construcción y Gündogan la magia llegando más arriba.
Sin embargo, con ellos tres no bastará porque habrá más lesiones, sanciones y momentos en los que alguno necesite descanso. Quien más garantías ofrece, por curioso que parezca al ser alguien que ha regresado hace poco, es Fermín. El canterano ha dejado muy buenas actuaciones siempre que ha jugado (al margen de El Clásico de pretemporada) y ahora mismo es una de las figuras más fiables para el Barça.
Oriol Romeu se podrá desempeñar en labores más defensivas, si bien es cierto que ha dejado algunas dudas en lo que va de temporada. Sergi Roberto es otro que puede actuar perfectamente en el centro del campo. Es cierto que su polivalencia le ha llevado a jugar más asiduamente en el lateral derecho, pero el canterano tiene su sitio natural en la zona ancha. Lo peor para Xavi es que fuera de estas alternativas ya todo pasarán a ser inventos.
Christensen, Cancelo o hasta Marcos Alonso pueden actuar en caso de emergencia en la posición más retrasada del centro del campo, pero desde luego que no parecen la opción más fiable y además también debilitarían la defensa, donde los dos primeros se han convertido en habituales.
El mercado de invierno
En caso de emergencia y de necesidad, el FC Barcelona ha tirado en los últimos años de La Masía casi a la desesperada. Hay varios ejemplos exitosos recientes, pero no parece la opción más segura tener que acudir de nuevo a los jóvenes valores para sacar las castañas del fuego.
Aparece, por lo tanto, la opción de que el Barça se lance al mercado de fichajes este invierno. Quizás tampoco tengan demasiadas esperanzas los culés puestas en esta vía, especialmente porque la maltrecha economía sigue apretando y el Fair Play financiero ahoga al club con los salarios.
Una gran estrella no está al alcance de Joan Laporta ahora mismo, y las palancas ya parecen haberse agotado. Todas esas que permitieron traer en los últimos tiempos a Lewandowski, Marcos Alonso, Raphinha, Gündogan y compañía.
Si se pone a tiro una oportunidad que resulte buena, bonita y sobre todo barata, se valorará. Xavi quiere que haya refuerzos y ahora se antoja más necesario que nunca que llegue alguien más en el centro del campo. Si no encuentra el recambio adecuado, el Barça tendrá que tirar con lo que tiene ahora mismo a su disposición hasta el final de la temporada.