Jens Lehmann dejó hace años el fútbol, pero continúa siendo noticia por sus extravagantes actos. Esta vez la cosa estuvo cerca de acabar en tragedia por lo macabro de los hechos y el exportero de la selección alemana o el Arsenal ha sido condenado a pagar una estratosférica multa por sus actos.
El que fuese uno de los mejores guardametas del mundo utilizó una motosierra durante una disputa vecinal. Sus amenazas a la persona a la que se estaba enfrentando acabaron con daños en los hierros de un tejado del residente, ya que la pretendía utilizar porque unas vigas se interponían en sus vistas a un lago. Esto provocó que se interpusiese una denuncia contra él y ahora la Justicia de Alemania ha dado su veredicto.
Un tribunal del país ha decretado que Jens Lehmann tendrá que pagar 210 multas de 2.000 euros por insultos, intento de fraude y daños materiales. Previamente en el juicio, el exportero se escudó en que sufría problemas psicológicos para intentar disminuir el castigo, sin embargo, no le funcionó.
La jueza del caso consideró que intentó convertirse "consistentemente como una víctima del sistema judicial". Por ello, la Fiscalía pidió una multa de 216.000 euros para Lehmann, pero que se ha visto incrementada por las contradiciones que encontró la magistrada acerca de la versión del exjugador.
Esto ya ha dado lugar a que Jens Lehmann haya sido condenado a 10 meses de prisión y a pagar 420.000 euros. Esto se debe a que la jueza dijo que el alemán "se había presentado de manera constante como una víctima" a lo largo del proceso y señaló que "no es una víctima, sino un agresor" y que presentó "historias inauditas en su defensa".
Polémica constante
Jens Lehmann ha dado mucho que hablar desde que abandonase los terrenos de juego. El alemán ha acumulado muchos episodios polémicos en los últimos años, ya ha recibido numerosas condenas y multas por sus actos. La primera de ellas llegó en el año 2017, cuando fue castigado con 40.000 euros por 'ayudar e incitar a escapar de un accidente'.
Tan solo un año más tarde, fue multado con 170.000 euros por evadir impuestos. De ahí a 2021 tuvo un lapso de tranquilidad hasta que fue investigado por la Fiscalía de Múnich por no pagar las tasas de aparcamiento en el aeropuerto de Múnich y por no abonar las tarifas por cargar su coche eléctrico en diversos parkings de la ciudad.