El FC Barcelona ha comenzado a levantar el vuelo tras superar una crisis de resultados y ha conseguido auparse hasta la segunda posición del campeonato liguero. Xavi Hernández parece haber impregnado a sus futbolistas de un espíritu aguerrido sobre el terreno de juego. Una marcha más que le ha salido cara al equipo y cruz al entrenador.
Xavi Hernández es un entrenador pasional y, desde el banquillo, trata de transmitir ese ímpetu. Ese exceso le ha provocado varios encontronazos con los árbitros y el último ejemplo de ello fue su expulsión frente al Atlético de Madrid. El de Terrasa perdió los estribos una vez más y uno pudo terminar de ver la victoria de los suyos en el Cívitas Metropolitano.
El ansia a Xavi le ha pasado factura en numerosas ocasiones y se ha convertido de lejos en el entrenador más amonestado de la Primera División española esta temporada. Curiosamente, ha sido tantas veces expulsado como veces vio la tarjeta roja en su carrera como futbolista, donde acumuló más de 500 encuentros. Sin embargo, siendo entrenador acumula menos de 100 partidos, por lo que la proporción es muchísimo mayor ahora.
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Acumula 22 tarjetas amarillas y 2 cartulinas rojas desde que está en el Barça. Esta temporada ha alcanzado ya las nueve amarillas y ha sido expulsado dos ocasiones, esta frente al Atlético de Madrid y otra contra el Getafe tras perder los papeles al protestar desde la banda.
Sevilla FC (2), Atlético de Madrid (3), Eintracht Frankfurt, Rayo Vallecano, Inter de Milán, Athletic Club (3), Osasuna, Espanyol, Girona, Almería, Real Madrid (2), Oporto, UD Las Palmas, Barbastro, Villarreal y Granada son los rivales frente a los que ha visto, como mínimo, una tarjeta amarilla en su carrera como entrenador. Son quince en Liga, cuatro en Copa del Rey, dos en Champions League y una en Europa League. Una cifra demasiado elevada para un técnico que acostumbra a ganar la mayor de las veces.
Más que sus predecesores
Xavi Hernández ha recibido un volumen muy elevado de tarjetas amarillas durante sus cerca de dos años en el FC Barcelona. De hecho, supera ampliamente a sus predecesores en el cargo, ya que no hay ninguno que se le acerque sustancialmente. Ese aire protestón del técnico culé le ha costado muchos disgustos.
Por hacer comparativas con otros entrenadores del Barça, el que más se le acerca es Pep Guardiola. El ahora técnico del Manchester City vio tres tarjetas rojas y cuatro cartulinas amarillas. Números muy alejados y más si miran desde la perspectiva de que estuvo cuatro años en el cargo.
Tata Martino y Tito Vilanova solo vieron una tarjeta durante su estancia en el banquillo culé y fue la roja. Por su parte, Luis Enrique solo vio una amarilla en sus tres temporadas en la Ciudad Condal y Ernesto Valverde, en dos temporadas y medias, fue amonestado en seis ocasiones.
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La explicación
El carácter de Xavi Hernández ha ido agriando con el paso de las jornadas. El técnico culé ha sacado su peor versión en los banquillos en una temporada donde ha sido incapaz de revertir a tiempo el rumbo de su equipo. La presión por los resultados y la desesperación ha provocado que haya dado su peor versión desde la banda.
La frustración en numerosas ocasiones le ha pasado factura y los árbitros, ante sus crecientes exigencias y protestas desde el área técnica, no han duda en mostrarle la tarjeta amarilla. Aún así, el gran carácter de Xavi le ha hecho acumular una cartulina cada cinco partidos.
El técnico del Barça se ha encargado de explicar en varias ocasiones que el principal motivo de su exceso de ímpetu en el banquillo y ha señalado a su pasionalidad como el principal problema. Él no ha sido capaz de controlarse en ciertos momentos y la tensión le ha jugado malas pasadas. Eso sí, también ha indicado que no pretende cambiar.
"El problema es que hay tensión, quiero ganar y quiero que gane el Barça que es mi equipo de corazón. En eso estoy, sí que es verdad que en algunos momentos me tengo que controlar un poco más. Nada más. No voy a cambiar. Soy así, soy pasional. Es mi manera de ser y de competir y para nada va a cambiar mi imagen ni mi manera de ser", explicó a los micrófonos de Movistar+ ante la Supercopa de España.
Ahora falta ver si Xavi Hernández es capaz de cambiar tras este último episodio. A falta de apenas un puñado de jornadas para la finalización del campeonato liguero y de lo que ocurra en la Champions, tiene la oportunidad de cambiar esa imagen que se ha instaurado sobre él.