Dani Alves ha pasado su primera noche fuera del Centro penitenciario de Brians 2 en el que ha estado recluido los últimos 14 meses. El exfutbolista ha logrado la libertad provisional tras el pago de una fianza de un millón de euros, la cual tardó cinco días en lograr abonar debido a los problemas de liquidez que tiene actualmente.
Tras su primera noche en libertad, Bruno Brasil, un chef brasileño íntimo amigo del exfutbolista ha sido una de las primeras personas en visitar su casa para ver a Alves. Bruno ha sido en los 14 meses que ha estado en prisión, la visita más recurrente y frecuente del jugador brasileño.
Bruno acompañaba a Alves el día en el que el brasileño violó a la joven y fue uno de los testigos claves para la defensa. El Chef explicó su versión de lo sucedido. Con ella, siempre intentó defender que todo lo sucedido en la discoteca Sutton no es como se contó y que la acusación que pesa sobre el brasileño no es totalmente cierta.
Dani Alves decide regresar a su casa tras salir de prisión
[El hermano de Dani Alves contesta a Irene Montero: "Se arrepentirán de la crueldad que le hicieron"]
Clave en el juicio
"Habló con todas, como yo, pero más con ella, que se acercó a él, en algunos momentos bailando y rozándose, llamando su atención", explicó Brasil en una entrevista concedida al programa 'Y ahora Sonsoles'.
"Además, recuerdo que en un momento dado de la noche Dani se separó de ella para hablar con otras amigas y fue esta misma joven quien volvió a acercarse a él. Entraron y salieron por separado y pasaron unos 15 minutos", recalcó el chef, explicando desde un punto de vista diferente lo sucedido en el local de ocio nocturno la noche antes de que acabase el 2022.
Durante el juicio, su versión se basó en recalcar que Alves estaba bajo los efectos del alcohol en ese momento, en la línea de lo que declaró también la mujer del exfutbolista, Joana Sanz. La modelo declaró ante el juez que Dani llegó muy borracho a casa aquella noche.
Dani Alves, en el juicio en la Audiencia Provincial de Barcelona por agresión sexual
[El padre de Neymar no pagará la fianza de un millón de euros de Dani Alves: "El asunto se acabó"]
"Bebimos 5 botellas de vino y una botella de whisky. Son las que aparecen en el ticket del restaurante. Más o menos, yo bebí 1 botella y media de vino y varias copas de whisky. Cuando salimos del restaurante, fuimos al Nuba y tomamos una ronda de Gin tonic. Para llegar hasta allí, fuimos en coche. Conducía Bruno, porque yo había bebido bastante y no podía conducir", declaró Dani Alves ante el tribunal siguiendo la línea exculpatoria que intentó la defensa.
Durante el juicio, los peritos reconocieron que el consumo de alcohol que se deduce de los tiques de consumición y de las imágenes de Sutton pudieron afectar "levemente" las capacidades cognitiva del procesado, pero que "distinguía el bien y el mal, sabía lo que estaba sucediendo".
Una vieja amistad
Aunque para la mayoría es prácticamente un desconocido, Bruno Brasil cuenta con más de 60.000 seguidores en Instagram. En esta red social, se le puede ver en numerosas publicaciones junto a la exestrella del FC Barcelona. No solo es su amigo, sino que también le brinda asesoramiento como nutricionista.
Además de compartir sus platos y recetas, Bruno revela en sus historias que tiene un pasado como deportista, habiendo formado parte del equipo de vóleibol del 'Comando Militar do Nordeste Brasil'. Con el paso de los años, Bruno se reconvirtió en chef, comenzando su carrera colaborando con su amigo Bruno BBQ.
Bruno Brasil junto a Dani Alves y un amigo común en un avión
Su lealtad a Dani Alves en todo este tiempo ha sido clara. No sólo es quien más le ha visitado en la cárcel, sino uno de los que más ha trabajado para que el exfutbolista saliera indemne de este caso. Antes del juicio y poco después de la noche en que el jugador brasileño violó a la joven en la discoteca Sutton, se puso en contacto con la prima de la víctima para tratar de calmar a las jóvenes y que lo sucedido no fuera a más.
El confidente de Alves escribió a la prima de la víctima a través de la red social Instagram. “Seamos hermanos. Mi casa está en… No estoy siempre, pero lo que necesites aquí estoy disponible”. A ese mensaje, la joven contestó: "Muchas gracias e igualmente. Feliz año nuevo".
La conversación fue parte del sumario del caso y durante el juicio la defensa de la joven afirmó que con estos mensajes el amigo de Alves intentaba conocer cómo se encontraba la víctima y, sobre todo, si tenía intención de denunciar lo sucedido. En la declaración ante los Mossos, la víctima y su prima se mostraron convencidas de que el amigo de Alves solo realizaba una labor indagatoria.