Cheikh Kane Sarr era un futbolista desconocido hace cinco días y de la noche a la mañana ha pasado a estar en los focos. El motivo: los insultos racistas que recibió el pasado sábado, en un partido de Primera RFEF en el campo del Sestao River. El portero del Rayo Majadahonda ha querido salir a hablar sobre lo ocurrido.
Este miércoles, Cheikh Sarr conocerá la resolución de su sanción después de ser expulsado tras enfrentarse al aficionado que le insultó desde la grada. "Antes de sancionar a alguien debes saber si es víctima y después, lo sancionas", dijo en una comparecencia ante los medios. El posible castigo podría ir de 4 a 8 partidos por agarrar de la bufanda al hincha del Sestao.
"Me siento jodido, pero ahora me siento mejor después de todo lo que ha pasado y que la gente lo vea. Estoy arrepentido de mi reacción y si el día de mañana me vuelve a pasar, ya sé cómo reaccionar", explicó el futbolista de Senegal que lleva seis años jugando al fútbol en España.
Cheikh Sarr explicó que no era la primera vez que recibía un insulto racista en España: "La primera vez no fue como la semana pasada, era como de broma, pero esto era una cosa horrible que no podía aguantar". "Mi intención era saltar con él y hablarlo, cogerlo y preguntarle el porqué. Saber si tiene familia y por qué. Era una persona mayor, creo que tenía un niño y debe ser un ejemplo", explicó sobre su agresor.
Su polémico incidente llegó en un fatídico fin de semana en el que Marcos Acuña y Quique Sánchez Flores, jugador y entrenador del Sevilla respectivamente, también sufrieron insultos racistas. A esto hay que sumar la alargada sombra del 'caso Vinicius'. Cheikh Sarr espera que estas denuncias traigan consigo un cambio en el fútbol español: "Creo que sí".
Precisamente, fue Vinicius uno de los primeros personajes públicos que le brindó su apoyo tras los hechos: "Agradezco su defensa. Hay muchos jugadores cómo él que están peleando contra el racismo y agradezco lo que ha hecho".
El portero del Rayo Majadahonda reincidió en su deseo de "pedir disculpas al mundo del fútbol" por su reacción en el campo. "Mi acto sobre el árbitro no era agresivo. Fui a hablarlo y manifestarlo porque él no estaba ahí y me sacó una tarjeta roja. Quería ir con todo el respeto del mundo. Repito, creo que debería preguntar primero a la víctima". Cheikh Sarr contó que, unas horas después, tuvo una charla con el colegiado: "Estoy agradecido", dijo.
"Si me va a caer una sanción, me sorprenderá mucho"
Un periodista le planteó a Cheikh Sarr que, si él era el agredido verbalmente, por qué pedía perdón y no era al revés: "Esto me jode muchísimo, pero hay que ser un poco respetuoso y creo que es lo más correcto. Aunque sea la víctima, tienes que pedir perdón al mundo del fútbol. Lo hago por la imagen del fútbol".
"Si me va a caer una sanción, me sorprenderá mucho. El club sabe lo que tiene que hacer, yo soy solo un jugador", señaló sobre el posible castigo que puede recibir. Antes de concluir, el portero desveló haber recibido el mensaje de apoyo de varios jugadores del Sestao River. Su caso pone un escalón más en la lucha contra el racismo en el fútbol español.