Así es La Cartuja, la 'casa' de la RFEF en Sevilla: un estadio de 120 millones de euros para la final de Copa

Este sábado 6 de abril se disputa la final de la Copa del Rey. Athletic Club y Mallorca se ven las caras en el Estadio de La Cartuja, uno de los campos de la ciudad de Sevilla y que ha sido sede del último partido del torneo en las últimas cuatro ediciones. 

La Cartuja ya ha coronado a cuatro clubes diferentes: Real Sociedad, FC Barcelona, Real Betis y Real Madrid. Por lo tanto, este año continuará con su tradición de tener a un nuevo campeón en sus cinco ediciones. Sin embargo, la de este 2024 será un tanto especial, ya que llega en mitad del terremoto que se ha producido en la Real Federación Española de Fútbol. 

De hecho, este miércoles se ha producido el regreso a España procedente de República Dominicana de Luis Rubiales, expresidente de la RFEF y quien se encuentra siendo investigado por presuntas irregularidades al frente del ente federativo. Esos negocios que están siendo estudiados a fondo por parte de las autoridades salpican incluso a la propia Cartuja, el estadio que ha pasado a ser conocido como la 'casa' de la RFEF. 

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En los últimos años, el coliseo sevillano ha sido designado como el estadio en el que se deben disputar las finales de la Copa del Rey, pero también algunos partidos de la selección española. Una situación que recuerda a lo que sucede, por ejemplo, en Inglaterra con Wembley. 

Sin embargo, el Estadio de La Cartuja de Sevilla que ahora dará cobijo a las aficiones de Athletic y Mallorca es una instalación deportiva perseguida por la polémica desde su construcción. Esa que respondió a la celebración de unos Juegos Olímpicos fantasma fruto de la emoción que dejó en la capital hispalense la Expo de 1992. 

¿Cuánto costó el Estadio de La Cartuja?

El Estadio de La Cartuja es un recinto multiusos ubicado en la isla de la Cartuja y que pertenece a la ciudad de Sevilla y al municipio colindante de Santiponce. Actualmente es gestionado por la Sociedad Estadio Olímpico de Sevilla SA (EOSSA), en la cual se encuentran representados la Junta de Andalucía (40%), el Gobierno de España (25%), el Ayuntamiento de Sevilla (19%), la Diputación (13%) y Real Betis y el Sevilla, los cuales comparten el 3% final. 

Su inauguración se produjo el 5 de mayo de 1999 y se construyó con motivo de la disputa del Mundial de Atletismo de ese mismo año en la capital hispalense. Sin embargo, el fin último era que fuera la cabeza de cartel de las candidaturas olímpicas de Sevilla para los Juegos del año 2004 o los del 2008. Dos proyectos abocados y que se plantearon desde ciertos sectores de la ciudad tras el éxito de la Expo de 1992. 

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En estos momentos cuenta con una capacidad de 57.619 espectadores, los que le convierten en el quinto estadio más grande de España detrás del Camp Nou, el Santiago Bernabéu, el Civitas Metropolitano y el Benito Villamarín. Sin embargo, se trata de un coliseo poco agraciado para los aficionados al fútbol, ya que al contar con pista de atletismo, hace que el césped quede muy alejado de las gradas. 

No obstante, la gran polémica en torno al Estadio de La Cartuja gira alrededor de su elevado coste, especialmente en relación al poco uso que han tenido las instalaciones deportivas. Los presupuestos finales del mismo indicaban que el coste de su construcción fue de 20.458 millones de pesetas a los que habría que sumar los 907 millones de pesetas que costó hacerse con los terrenos. 

Vista del estadio de la Cartuja. EP Sevilla

Sin embargo, lo realmente grave se constata cuando se hace una estimación en euros de lo que supuso su construcción. Autoridades locales las situaban en torno a los 120 millones, "una inversión enorme para la época". Además, a esto habría que añadir costes adicionales como los de las diferentes cubiertas que se compraron para el estadio tanto en 2004 como en 2011 y que superan el millón y medio de euros. 

¿Cómo será la remodelación de La Cartuja?

Ahora, La Cartuja ha vuelto a recuperar parte de su vida gracias a que la RFEF lo ha convertido en su fortín particular. Allí se han disputado algunos partidos importantes de la selección española, encuentros de la Eurocopa de 2020 e incluso finales de la Supercopa de España antes de que esta viajara hasta Arabia Saudí. 

Sin embargo, la competición que más se ha asentado en el estadio es la Copa del Rey, la cual celebrará, con la de este año, cinco finales consecutivas. Por ello, La Cartuja llevará a cabo próximamente una profunda remodelación que tendrá un coste de 20 millones de euros. El objetivo principal es eliminar las pistas de atletismo para mejorar la experiencia de los aficionados. 

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Un proyecto con vistas al Mundial de 2030 y que tendrá un momento importante cuando el Real Betis se traslade a jugar allí en enero de 2025 para poder acometer las obras de remodelación de su estadio. Con la retirada de las pistas, se podrá añadir un anillo de graderío más que elevará su capacidad hasta cerca de 70.000 localidades. 

También se realizarán mejoras en los accesos y en el entorno, así como la puesta en marcha de un contundente plan de movilidad que haga más accesible la entrada y la salida para los usuarios.

¿Por qué se juega la final de la Copa del Rey en La Cartuja?

La Copa del Rey se jugará, un año más, en el Estadio de La Cartuja de Sevilla. Muchas personas se preguntan por qué ya no se disputa el partido estrella del fútbol español en algunos de los mejores estadios de nuestro país como el Santiago Bernabéu, recién remodelado, o en San Mamés o Mestalla, feudos clásicos donde los haya. 

Y el motivo es muy sencillo. La Real Federación Española de Fútbol, bajo la presidencia de Luis Rubiales, firmó un acuerdo con la Junta de Andalucía para albergar las finales de la Copa del Rey desde el año 2020, cuando se disputó la primera, hasta el 2025. Por lo tanto, todavía esta edición y la siguiente se disputarán en suelo sevillano. Esta será la octava final que se dispute en la ciudad después de las de 1925, 1999, 2001, 2019, 2020, 2021, 2022 y 2023. 

Ahora, el Estadio de La Cartuja se encuentra en mitad de una de las investigaciones que relacionan a la RFEF con contratos irregulares. Tal y como informó EL ESPAÑOL, la Justicia investiga a Luis Rubiales por la adjudicación de un contrato cercano al millón de euros concedido por la empresa Estadio La Cartuja de Sevilla SA, gestora del recinto deportivo que lleva el mismo nombre, a la constructora Grupo Constructor SA, conocida como Gruconsa.