En el vestuario del FC Barcelona crece la semilla de una crisis. La eliminación en Champions League contra el PSG fue dura. Tras ganar en el Parque de los Príncipes, los azulgrana se hundieron en casa. El punto de inflexión fue la expulsión de Ronald Araújo, a la media hora de partido.
Esto encendió al uruguayo, que hacía un polémico gesto de robo al abandonar el campo, y a Xavi Hernández, que en la segunda parte también vio la roja. Pero no todos en Can Barça lo sienten así. Ilkay Gündogan mostró la divergencia de opiniones que parecían coexistir en la plantilla.
El centrocampista alemán del Barça, campeón de la última Champions con el Manchester City, lanzó en la zona mixta de Montjuïc un mensaje que, lejos de excusar la eliminación en el arbitraje, apuntó directamente a sus compañeros. Sobre todo, a Araújo. Gündogan sí cree que hubo falta sobre Barcola y que, al ser el último hombre, era de expulsión.
"Estoy decepcionado, muy decepcionado. Estaba en nuestra mano y se lo hemos regalado al PSG. Se lo hemos regalado de la forma más fácil", dijo Gündogan tras el partido en declaraciones a la cadena estadounidense CBS Sports. "Quedarte con uno menos tan pronto te mata en el partido", analizó.
A diferencia de Xavi, que dijo que "Araújo intenta apartarse y Barcola se deja caer", Gündogan señaló el error de su compañero: "Es duro decirlo... Pero en estos momentos tan cruciales tienes que estar seguro si vas a por el balón. Yo no sé si toca el balón o no... Yo prefiero conceder un gol o incluso permitir un uno contra uno. Yo no sé si llegaba al balón o no, pero dale al portero la oportunidad de pararla, o incluso dales el gol", señaló.
Ronald Araújo, expulsado ante el PSG
Con su análisis de la expulsión, Gündogan retrató las excusas de Xavi. Esto fue lo que dijo el técnico catalán antes: "Es una pena que el trabajo de toda una temporada se termine por una decisión arbitral. Hay expulsiones en el fútbol, pero el árbitro ha estado muy mal. Un desastre. No me gusta hablar de los árbitros, pero lo tenemos que decir. No nos podemos callar".
En el vestuario del Barça hubo más cruces de opiniones. Frenkie de Jong, por ejemplo, estaba del lado de su entrenador: "Mi sensación es que el control de Barcola es largo e iba al portero, pero no he visto la repetición", dijo. El portero al que hacía referencia era Ter Stegen, quien sí era proclive a que se mostrara la roja en una acción como la de Araújo: "Si pita falta tiene que enseñarle la roja y esto ha cambiado todo. Ahora que veo la repetición, sí, lo agarra por ahí, sí, se puede pitar", dijo el alemán.
Otras polémicas
Gündogan también expresó su enfado por otro error de sus excompañeros. Sin señalar a nadie en concreto, el centrocampista cree que la defensa se equivocó en el gol de Vitinha desde fuera del área (en el 1-2): "Otro error. Hay que salir a cerrarlo. No hay que dejarle chutar. ¡Estaba libre! No es nada que no hayamos entrenado. El jugador más próximo al balón tiene que saltar a cerrar. Era un tres contra tres después del córner, llega Vitinha... hay que ir a por él. Nadie salió y si lo hizo, fue tarde".
Aunque el ex del City también tuvo para Kóvacs, el árbitro del partido. En concreto, se quejó de un penalti que no le pitó con 1-3 en el marcador: "Creo que merecía un penalti. Estaba corriendo y el rival claramente me bloqueó. Le dije al árbitro que era penalti y en lugar de eso me sacaron una tarjeta amarilla", protestó. Noche de terror en Montjuïc.