El FC Barcelona y Xavi mantendrán unidos sus caminos, al menos, hasta 2025. Es decir, habrá un Barça 2.0 de Xavi. Tras una semana frenética, en la que el conjunto culé ha dicho adiós definitivamente a todos sus objetivos, un nuevo giro de guion esperaba en el club. El técnico de Terrasa se iba a final de temporada, pero cambiaba su decisión este miércoles tras una reunión con Laporta.
Apresuradamente el Barça convocó una rueda de prensa este jueves para celebrar la continuidad de su entrenador. Parecía imposible, pero se acabó logrando que Xavi no se marchase a final de curso. Ante los medios, la comparecencia estuvo marcada por la palabra "proyecto" y por el adjetivo "ganador".
Tanto Joan Laporta como Xavi Hernández incidieron en reiteradas ocasiones que el Barça, pese a los fracasos de esta última semana, está capacitado para ganar y que nunca ha perdido ese aura. Sin embargo, la realidad de esta temporada dice completamente lo contrario pese a ese discurso motivador.
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El Barça ha sido incapaz de ganar los grandes partidos. Cayó en los cuartos de la Champions League frente al PSG cuando lo tenía todo a favor y el Real Madrid le ha ganado en sus tres enfrentamientos este curso, final de Supercopa de España incluida. Un duro golpe del que está por ver que se reponga. Vivieron durante gran parte del curso, pero sus equilibrismos fueron incapaces de mantenerles vivos hasta el final.
Mientras tanto, queda la duda de si el Barça será capaz de revertir estas dudas en el próximo mercado veraniego. Sin la capacidad económica para afrontar grandes desembolsos, el club presidido por Joan Laporta sabe que primero necesita vender para ir a por grandes futbolistas. Esto les conllevaría deshacerse de algunos de sus bienes más preciados.
Insisten en "un proyecto ganador"
Tanto Xavi como Laporta apenas tardaron unos segundos en sus respectivos discursos en hacer alusión a "un proyecto ganador". Como si se hubiesen puesto de acuerdo en plasmar dicha idea desde un primer momento, fueron muchas las veces en las que se refirieron a ello.
"Ahora hay una ratificación en la posición de Xavi, que tiene todo nuestro apoyo. Espero que el barcelonismo lo entienda porque esto va a ser un proyecto ganador. Xavi tuvo el coraje de asumir esta responsabilidad. Vale la pena creer en él", fueron parte de las palabras iniciales de Joan Laporta.
Xavi tampoco se quedó atrás y siguió con esa misma línea cuando tuvo que alzar la voz frente a los medios. "Cuando me reuní con el presidente y le puse el cargo a su disposición él me ofreció una gran confianza y también toda la Junta. La complicidad y el apoyo de los jugadores han sido muy importante. También como el presidente creo que este proyecto no debe finalizar aunque esta temporada seguramente no consigamos títulos. Es un proyecto ganador", espetó.
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Una ilusión que contrasta con la sequía de esta temporada. Cierto es que ha habido algunos datos destacables, pero a la hora de la verdad el FC Barcelona se ha quedado fuera de la lucha por los grandes títulos. Perdió la final de la Supercopa de España, dijo adiós a la Copa en cuartos, en Champions también fue derrotado en cuartos y llegó sin opciones en mayo a ganar la liga.
Es decir, ha sido incapaz de aguantar el ritmo de una temporada agotadora por mucho que quieran insistir Laporta y Xavi. Además, sustentan ese proyector 'ganador' es una Supercopa y una Liga, según el presidente culé histórica, cuando la realidad es que ni el Real Madrid compitió ni tuvo rivales que le apretasen. Además, en Champions también fracasaron.
Por lo tanto, ese proyecto 'ganador' se basa únicamente en dos títulos y una base de jugadores llamados a tener peso en el club en el futuro, como pueden ser Fermín, Lamine Yamal o Cubarsí. Más allá de eso, han utilizado, como otra de tantas veces, un discurso para avivar al público culé.
Los refuerzos
Mucho se ha especulado sobre cómo será el mercado de fichajes del Barça. Xavi dejó claro que no ha pedido nada, pero que el club se reforzará lo mejor posible. Curiosamente, la misma idea que plasmó Joan Laporta. Una vez más, mantuvieron una línea muy similar.
"Esto es de grupo, hay un consenso. Soy un hombre del club y así lo siento, tengo gran sintonía con Deco y el presi. Somos una familia. Siempre miraré por el bien del club para reforzarnos lo mejor posible y en la medida que podamos. Trabajaremos. No he puesto condiciones para seguir", declaró Xavi.
Además, para más inri, Deco, actual director deportivo del club y otro de los señalados esta temporada, les acompañó durante la rueda de prensa. Por el portugués pasarán gran parte de las operaciones de este verano, por lo que apunta a ser un hombre clave en los refuerzos.
Laporta, por su parte, quiso lanzar las campanas al vuelo y fue mucho más contundente, como suele ser habitual en él. "No ha llegado la aprobación de LaLiga, pero algunos comentarios confirman el buen camino. La recuperación económica del club es un hecho, el Espai Barça va tomando forma", indicó.
Sin embargo, todo hace indicar que el Barça tendrá que hacer algún sacrificio este verano, a pesar de las palabras de Laporta. El club necesita ingresar y hay varios jugadores que pueden hacer que crezca el montante económico de la entidad culé. Araujo, Lamine Yamal o Frenkie de Jong son algunos de los futbolistas que podrían llenar las arcas, puesto que podrían sacarse 100 o más millones por alguno de ellos.
Además, también hay que recordar que el Barça no puede gastar todo lo que le entre. Todavía están sometido a un férreo control por parte de LaLiga y no se les aplica el 1:1, por lo que necesitan obtener mucho más de lo que les llegue. Es decir, es altamente improbable que se de tanto esos "refuerzos" como ese "proyecto ganador".
Además, hubo otro dato relevante. Cuando se dijo que se marchaba Xavi, se intentó buscar un entrenador de garantías, de máximo nivel. Se habló de Klopp o Arteta, pero solo acabaron relacionados técnicos sin contrato o de equipos secundarios. En gran parte se debe a que muchos de ellos no ven ese proyecto ganador del que se habla y a que el club no puede afrontar firmas de ese calibre.
Por lo tanto, parecen casi obligados a vender a estrellas o jóvenes emergentes para poder acudir al mercado. De no hacerlo, parece claro que no se moverán mucho más allá de conseguir los fichajes de futbolista que acaban contrato, como ya hicieran con Iñigo Martínez o Gündogan, o traspasos con jugadores de menor nivel, como sucedió con Oriol Romeu. También puede recurrir a las cesiones como Cancelo o Joao Félix, pero siempre se corre un riesgo severo. Se ha vendido un plan, pero no está tan bien definido como aparenta.