El Real Madrid se proclamó campeón de Liga por trigesimosexta vez en su historia después de vencer al Cádiz y la posterior derrota del Barça frente al Girona. Como era de esperar, miles de aficionados madridistas acudieron a la plaza de Cibeles a celebrar el título. No fueron los futbolistas, pero la fiesta se hizo igual.
Más de 5.000 madridistas en los alrededores de la plaza de Cibeles festejaron de forma calmada el campeonato liguero de su equipo. Sin disturbios, sin incidentes y con el tráfico abierto, se vivió una celebración que finalizó a medianoche.
En ella, los hinchas del conjunto blanco realizaron numerosos cánticos en favor de su equipo, pero también se acordaron de sus máximos rivales: el Barça y el Atlético de Madrid. Sonaron cánticos de "Xavi quédate", además de otros contra el técnico azulgrana.
También fueron protagonistas Piqué o Laporta, pero la mayor parte de los cánticos iban en favor del Real Madrid. Sonó en varias ocasiones el "Sí se puede", haciendo referencia al partido de Champions.
Objetivo Múnich
Los futbolistas del Real Madrid no acudieron a Cibeles. Estaba pactado desde el día anterior. La razón era simple: había que poner el foco en la eliminatoria de semifinales de la Champions League frente al Bayern de Múnich. Ya habrá tiempo para celebrar y, porqué no, por partida doble.
Una decisión que el madridismo entendió perfectamente. "Lo entendemos, el miércoles tienen un partido importante y tienen que estar centrados. Nos da pena que no se haya ganado la Liga en el Bernabéu, pero los jugadores tienen que estar mentalizados", apuntaba un aficionado presente en Cibeles.
Dónde si que celebraron el título los jugadores fue en el palco del Santiago Bernabéu. Tras su victoria ante el Cádiz se quedaron en el estadio viviendo juntos el choque entre el Girona y el Barça. Una vez finalizó el duelo, se desató la locura. Todos los jugadores, que formaban una piña, comenzaron a realizar cánticos y a felicitarse mutuamente tras poner la guinda a una temporada sobresaliente.
Primero llegó el cántico de "Campeones, campeones", seguido de un "Así, así, así gana el Madrid". Llegaron los aplausos y a continuación los jugadores se acordaron de uno de los futbolistas de la plantilla que más ha sufrido esta temporada: Thibaut Courtois. Corearon su nombre y le rodearon dándole collejas en forma de cariño.