Xavi Hernández pende de un hilo. El futuro del todavía entrenador del FC Barcelona vuelve a estar en el aire. El detonante fue el sincero y realista discurso del técnico sobre la situación del club en sus últimas comparecencias. Xavi, sólo ante el peligro, volvió a dar una rueda de prensa sin que ningún directivo del club se haya pronunciado en público sobre el último lío.
Sorprendió la actitud con la que Xavi entró en la sala de prensa, con una sonrisa en su rostro y asegurando que para él "no ha cambiado nada". "No os puedo decir más que el club me transmite tranquilidad y yo sigo con las mismas ganas de afrontar esta temporada y la que viene. No puedo decir más. No cambia nada", dijo en una conferencia que giró en torno a su futuro y los rumores.
"La confianza del presidente está intacta, y la de Deco. A mí me transmiten eso y para mí no cambia nada", apuntó un Xavi que se sigue viendo al frente del equipo a pesar de lo dicho en las últimas 48 horas en los medios.
"Estamos en contacto permanente y si tenemos que hablar, hablaremos. Está todo como hace tres semanas cuando anunciamos mi continuidad. Si hay algún cambio, os lo diremos. Entiendo las preguntas y la inquietud, pero estoy tranquilo y concentrado en ganar mañana", recalcó sobre su relación con Laporta.
Tras aquel discurso con cierto pesimismo, Xavi dejó un mensaje mucho más positivo para el aficionado culé en esta rueda de prensa: "Cero dudas de que la cosa puede ir bien conmigo de entrenador. Tengo una base en la plantilla extraordinaria con gente de casa. El año que viene podemos competir mejor que este. Tengo ganas, ilusión y la ambición intactas".
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"A los futbolistas le transmito todo con naturalidad y les he dicho lo que os he dicho aquí. Yo no tengo que engañar a nadie. Sentiros afortunados, he dicho lo mismo a los futbolistas que a vosotros. Hay ruido fuera y estas cosas pasan. La plantilla está bien y con ganas de ganar mañana. Estamos enfocados en el Rayo Vallecano mañana", añadió.
Pero los mensajes de Xavi no entierran las dudas sobre su futuro. En Cataluña fueron rotundos durante el viernes, afirmando que su adiós ya estaba decidido y que, incluso, Deco había tanteado en Portugal a Sergio Conceiçao -entrenador del Oporto- como posible reemplazo. Rafa Márquez, técnico del Barça B, sigue siendo otra opción que gusta a parte de la directiva.
Sin novedades a horas del partido contra el Rayo, parece que la próxima semana será decisiva para saber si el Barça sigue adelante con el plan de destituir a Xavi. Hacerlo, sin llegar a un acuerdo con el técnico, echarle junto a su cuerpo técnico le costaría 20 millones de euros al club.