El Fútbol Club Barcelona comienza a otear en el horizonte su regreso al Camp Nou. Las obras avanzan, aunque lejos del plan establecido, y se cuentan los días para ver a los jugadores disputando un partido de nuevo. La idea inicial es que a mediados de diciembre se produzca tal acontecimiento, pero eso está por ver.
Mientras tanto, con la temporada casi finalizada es hora de hacer números y toca repasar lo acontecido en Montjuïc. El Estadio Lluis Companys ha sido el recinto donde el Barça ha disputado todos sus partidos esta temporada. Sin embargo, no ha sido capaz de cumplir las expectativas iniciales del club.
De media, 40.931 aficionados han acudido a las gradas de Montjuïc para apoyar a sus futbolistas. Un número que se aleja de los datos que había en el Camp Nou, por lo que se puede decir que el Estadio Olímpico Lluis Companys no ha sido capaz de movilizar a los seguidores culés a los partidos.
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En total, Montjuïc ha tenido una ocupación media del 81%, significativamente inferior a la que había en el Camp Nou, cifrada en el 84%. Pese a los planes iniciales del Barça mucho más sonriente, lo cierto es que el socio dio la espalda al club casi desde el primer momento en el que supieron que debían de trasladarse hasta el Lluis Companys.
Solo 17.064 de los 80.000 que tiene el FC Barcelona aceptaron mantener su asiento en Montjuïc. Además, muchos de ellos se encontraron con la penalización de que eran colocados en asientos completamente distintos a los que tenían en el Camp Nou. Por otro lado, también tenían que avisar al club si no asistían para que ellos tratasen de sacar partido de sus ausencias.
Estadio Olímpico de Montjuïc
Solo un lleno
El FC Barcelona solo ha visto un lleno en Montjuïc esta temporada. No se produjo frente al Real Madrid en El Clásico como era de esperar, aunque se quedó muy cerca. La mejor entrada quedó cifrada frente al PSG en la Champions League, acudiendo 50.309 espectadores al campo.
Por detrás quedaron los 50.301 del partido contra el Nápoles y los 50.112 del Clásico contra el Real Madrid. Estos tres encuentros han sido los únicos que han superado la barrera de las 50.000 personas en Montjuïc, algo que lleva al Barça a desear que se regrese lo antes posible al Camp Nou.
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Uno de los grandes inconvenientes del FC Barcelona en Montjuïc es que los fans están muy alejados del terreno de juego. La considerable distancia entre los aficionados y los jugadores ha penalizado enormemente y ha evitado que el feudo temporal culé se haya convertido en una auténtica caldera en los momentos indicados.
Desde el Barça no ven el momento de poder regresar al Camp Nou y así por lo menos ir recuperando el regreso del grueso de la afición. Pese a que la idea inicial es que el campo tenga más de 100.000 asientos, volverán con en torno a 60.000 butacas mientras continúen con las obras.