Sara Gutiérrez Alcaraz (Terrasa, 30 años) es una persona alegre. Adora su trabajo como periodista deportiva, y desde la temporada 2021-2022 ha encontrado en el mundo del fútbol femenino un nuevo hogar. Tiene claro que la victoria en el Mundial Femenino de Fútbol en Australia es uno de los mejores momentos que ha vivido en su carrera profesional.
Se define como sociable, y siempre ha vivido su vida intensamente.El próximo 29 de mayo estará disponible en librerías su primer libro: "Campeonas". Recoge la historia de las 23 jugadoras que marcaron la historia de España en el verano de 2023. Según la autora, lo que hace única a su nueva entrega son las palabras de las futbolistas, quiere que todos conozcan más de cerca la historia que hay detrás de cada una.
Cubre la actualidad del Barça femenino, siendo la Copa de la Reina uno de los últimos encuentros en los que ha podido formar parte. Un equipo que no da tregua y que continúa con su tiranía en el fútbol femenino.
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Tras ganar la final con una victoria aplastante de 8-0 sobre la Real Sociedad, el Barça busca el triplete. Con una diferencia de 20 puntos consiguieron ganar la Liga F, y la Copa pareció un torneo fácil para las azulgranas. El próximo sábado 25 de mayo intentarán completar su cuadro de victorias, contra el Olympique de Lyon en Champions.
Hoy 23 de mayo, con motivo de celebración por el Día Internacional del Fútbol Femenino, hablamos con Sara Gutiérrez sobre su libro, y la actualidad del mundo femenino y las polémicas que rodean a este deporte.
¿Cómo nace la idea de escribir este libro y por qué sobre estas 23 jugadoras?
La idea del libro nace cuando estaba en una concentración con la Selección. Thinking Head, la agencia intermediaria entre Planeta y yo, se puso en contacto conmigo y me dijeron que me habían estado siguiendo durante el mundial y que les gustaría hacer algo sobre las campeonas del mundo. Después de hablarlo con ellos, me preguntaron si tenía alguna idea. Les dije que si tuviera que escribir un libro, me gustaría dedicar un capítulo a cada jugadora, porque cada una es campeona del mundo, independientemente de cuánto hayan jugado.
Quería que cada campeona del mundo tuviera su espacio, para que la gente pudiera conocer no sólo cómo fue el mundial, sino cómo estas jugadoras llegaron a ser campeonas y qué hay detrás de sus historias.
En el libro cuentas cómo las futbolistas llegan hasta lo más alto, pero ¿qué hay de ti? ¿Cómo comienza tu historia en el fútbol femenino?
El periodismo siempre fue vocacional para mí desde pequeñísima. Siempre quise ser periodista deportiva. En la adolescencia, me gustaba mucho el fútbol, aunque luego me interesé más por el mundo del motor, especialmente el Dakar y MotoGP. Empecé en Radio Televisión Española cubriendo el Dakar desde el primer año. El fútbol femenino llegó a mi vida cuando mis jefes me propusieron cubrir el Barça femenino y me volví a ilusionar con el fútbol. Me encantó la proximidad y los valores. Ahora no puedo imaginar mi vida sin el fútbol femenino y el motor.
Si tuvieses que elegir, ¿qué te gusta más el motor o el fútbol femenino?
Es como elegir entre papá y mamá. No podría escoger porque ambos me aportan cosas diferentes. El Dakar es una aventura, pero lo que viví en el Mundial con las futbolistas fue muy especial. Nos convertimos en una familia. A día de hoy, no puedo elegir.
¿Cómo ha sido la experiencia de escribir tu primer libro?
Ha sido una carrera contrarreloj. Una cosa es la propuesta, pero hasta que no empecé a escribir realmente, el proceso tomó unos cuatro meses. Ha sido una experiencia agotadora pero muy bonita.
En cada capítulo cuentas la historia de las jugadoras desde sus comienzos, ¿crees que hay algún patrón común en sus historias sobre las dificultades para comenzar en el fútbol femenino?
El apoyo de la familia. Todas mencionan el sacrificio de los padres, llevarlas a entrenar, sacrificar horas de trabajo para que ellas pudieran jugar. Obviamente, hay mucho esfuerzo personal detrás, pero la familia ha sido clave para todas.
¿Cuál es la anécdota más divertida o curiosa que hayas plasmado en el libro?
Te diré dos. Una, que es más seria, es una entrevista con Eva Navarro después del mundial. Ella había tenido dos lesiones de cruzado y en la entrevista salió que había pasado un calvario psicológico con ansiedades y agorafobia, algo que no había contado antes. Fue impactante porque no lo sabía y me hizo reflexionar sobre lo que no vemos.
Como anécdota curiosa la de Cata Coll, que me parece una persona de diez porque es súper espontánea. En la conversación después del Mundial, salió el tema de que ella, en su pueblo, es como una más cuando celebran las fiestas locales. Pero en su caso, es un nivel más porque su madre tiene un negocio familiar y a veces le toca a Cata llevar cosas a casa de otras personas. Le decía, "¿Esto sigue pasando hoy en día siendo profesional?" Y me decía, "Sí, sí, si es necesario, lo hago." Imagínate que Cristiano Ronaldo se presenta entregando algo. Es como, ¡madre mía! Pero me parece maravilloso porque muestra la naturalidad de decir, si es necesario, ¿cómo no voy a ayudar?
¿Desde cuándo llevas cubriendo profesionalmente el fútbol femenino?
Desde la final de la Champions, un poco antes, en la temporada 2021-2022 cuando el Barça jugó la final de Turín. Ahí empecé con el Barça y en el verano de 2022 con la Selección. Desde entonces he estado fija entre Barça y Selección.
¿Cómo ves ahora mismo el fútbol femenino?
Los títulos han ayudado mucho. La situación ha cambiado drásticamente en pocos años. El Barça ganando títulos y la Selección ganando el Mundial ha sido increíble. También jugadoras nuestras reconocidas con premios individuales es muy importante. Las infraestructuras están mejorando, y las categorías inferiores están siendo más profesionales. Es importante que otros clubes sigan este camino para tener una Liga F más competitiva.
¿Ha crecido la afición al fútbol femenino?
Sí, ha crecido mucho. Los estadios se llenan en partidos importantes y hay muchas familias interesadas. Los niños ven el fútbol femenino con naturalidad, lo cual es crucial. Antes era raro ver esto, pero ahora es lo normal.
¿Qué opinas de la polémica sobre la superioridad del Barça en estos momentos?
Escucho gente diciendo que el Barça está muy por encima y debería bajar el nivel: ¡No!, ¡el Barça no tiene que bajar el nivel! Los otros clubes deben mejorar sus infraestructuras y apuestas para alcanzar al Barça. Esto hará que la Liga F sea más competitiva.
¿Crees que es un tema de inversión lo que les falta a los otros clubes?
En parte sí. Se necesita inversión económica para mejorar los entrenamientos, infraestructuras y recursos. No se trata solo de fichar, sino de tener una preparación adecuada para las jugadoras. Países como Francia tienen años de ventaja, pero estamos en el buen camino.
Queda mucho camino por recorrer en el mundo del fútbol femenino, pero ¿cuáles son los principales obstáculos a los que se enfrenta hoy en día?
A nivel profesional, la infraestructura y los recursos son claves. Todavía faltan cosas por mejorar, como la falta de recursos en los partidos. También es importante la apuesta de los clubes por el fútbol femenino, invirtiendo en entrenadores y cuerpos técnicos adecuados. El crecimiento ha sido lento, pero vamos en la buena dirección.
¿Crees que el polémico beso de Rubiales con Jenni Hermoso ha hecho que se cambien cosas?
Sí, fue un punto de inflexión. Las jugadoras se plantaron y hablaron, logrando algunos cambios. Aunque no sabemos todos los detalles, tenemos la certeza de que han conseguido progresos. La cumbre de Oliva mostró que algo ha cambiado, aunque no sabemos cuánto queda por mejorar.
Fue un Mundial complicado en este sentido para la gente que lo vivió aquí, pero sí que yo, al menos con gente que me he encontrado, me decía, "ah, pues he empezado a seguir a la Selección y ya desde entonces," para mí, más que la Euro 2022 o lo del beso de Rubiales, creo que la clave ha sido el crecimiento durante el Mundial y la final ha sido la culminación para los que no las habían seguido nunca, al menos ver esa final.
¿Hay más visibilidad del fútbol femenino a raíz de este momento?
Eso no lo sé. Para mí el detonante fue el hecho de llegar a la final del Mundial. Ganarla ya fue una locura, y creo que fue entonces cuando se popularizó del todo. Al final el hecho de llegar a un mundial es algo tan bestia, y sé de muchísima gente que me decía,"durante el Mundial conforme veía que ganaban, me enganchaba cada vez más a los partidos".
¿Hay algún mensaje o tema central que esperas que los lectores se lleven de tu libro?
Creo que lo más importante es que vean la superación, sacrificio y esfuerzo. Especialmente las niñas y adolescentes que quieran ser futbolistas profesionales. Que vean que nadie les ha regalado nada. Aunque nazcas con talento, sin esfuerzo no se llega a ningún lado. Quiero que empaticen con jugadoras como Alexia y Aitana, que a pesar de sus éxitos, han trabajado muchísimo para llegar donde están. Son historias de niñas normales que se convierten en heroínas y referentes.