Su afición no quiso dejar la oportunidad de reconocer el trabajo de un centrocampista que pasará a la historia del Real Madrid. El Bernabéu homenajeó como se merecía a uno de sus estandartes.
Antes del pitido inicial, un tifo con su imagen decoró la grada. Además, fue recibido por sus compañeros con un pasillo y aplaudido en el minuto 86 cuando fue sustituido por Dani Ceballos. Se marchó ovacionado y en el banquillo se abrazó entre lágrimas con su hija para dejar una fotografía inolvidable y para el recuerdo.
Tras el pitido final el Santiago Bernabéu rompió en un aplauso infinito que el '8' blanco devolvió con una vuelta de honor junto con sus hijos.
[Kroos se despidió del Bernabéu entre lágrimas: tifo y pasillo en un emocionantísimo adiós]