Ni que Kylian Mbappé haya jugado ya su último partido con el PSG ha servido para que las cosas se tranquilicen en París. L'Équipe cuenta este miércoles los detalles de lo que está siendo una separación traumática motivada por el enfado de Nasser Al-Khelaïfi, presidente del club, por la inminente marcha de su estrella al Real Madrid.
Según el citado medio francés, el PSG no ha pagado a Mbappé su salario de abril y, además, le debe desde febrero una prima de 80 millones de euros. Los abogados de las dos partes llevan semanas intercambiando correos para pactar los términos de salida del jugador, mientras que la relación entre Kylian y Al-Khelaïfi está totalmente rota.
El PSG, por orden de su presidente, ha bloqueado los pagos a Mbappé. Al-Khelaïfi se niega a pagar los 80 millones que debe el club al jugador desde febrero y la razón que da, según explica su entorno a L'Équipe, es que ese dinero le corresponde pagarlo al Real Madrid en concepto de prima de fichaje y no al PSG, como compensación a no haber renovado.
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Al-Khelaïfi, una vez más, es incapaz de aceptar la derrota. Hace dos años logró renovar contra todo pronóstico a Mbappé, a base de presiones, pero la historia ahora es diferente. El jugador lo tiene claro desde 2023, cuando ya se negó a ejecutar una cláusula unilateral que le permitía renovar su contrato hasta 2025. Aquello enfureción al presidente, que ordenó apartar al delantero del equipo si no renovaba o no aceptaba un traspaso.
En agosto de 2023, las aguas se calmaron parcialmente. Mbappé y Al-Khelaïfi se reunieron y el jugador se comprometió a renunciar a 80 millones, no de la prima que ajora le deben, para compensar que el PSG no fuera a obtener dinero por un traspaso este verano. Sin embargo, en los meses posteriores se mantuvieron las tiranteces sobre los términos económicos que toca pactar antes de su adiós.
Aquel "pacto de caballeros" que mencionó Al-Khelaïfi a principios de año, para buscar una salida amistosa de Mbappé en caso de no haber renovación, ha saltado por los aires en los últimos meses. También se filtraron recientemente las últimas presiones que ha ejercido el presidente del PSG sobre Kylian, esgrimando que no podía irse al Madrid porque "legitima la Superliga" y refuerza al "gran rival" del club parisino.
En febrero, Mbappé confirmó a Al-Khelaïfi su decisión de irse a final de temporada y el presidente lo filtró a sus medios afines. Desde entonces, el jugador cree que ha sido 'castigado' también en lo deportivo. Luis Enrique dejó de utilizarse como solía en la Ligue-1 y en el entorno del futbolista, según L'Équipe, deslizan que fue por orden de Al-Khelaïfi. Pese a ser su máximo goleador histórico, Mbappé tampoco ha tenido un acto de despedida como tal del PSG.
La tensión sólo va a más entre el PSG y Mbappé. El club le pide que renuncie también a esos 80 millones de euros y el jugador exige cobrar el dinero del salario que se le debe. La cosa está en manos de los abogados, mientras que el momento de ver a Kylian vestido de blanco en el Real Madrid se va acercando.