Uruguay se clasificó a las semifinales de la Copa América después de superar a Brasil en la agónica tanda de penaltis. Un encuentro poco vistoso en el que ninguno de los dos equipos supo imponer su fútbol y donde Manuel Ugarte se convirtió en el héroe de los 'charrúa' al anotar la pena máxima definitiva.
Vinicius, que se perdió el partido por sanción, vio como sus compañeros sucumbían ante el combinado uruguayo y se quedaban una vez más sin poder volver a convertirse en los reyes de América. El madridista Endrick, que ocupó su lugar en el once, fue el futbolista carioca que más lo intentó a lo largo de los 90 minutos. Sin embargo, no fue capaz de perforar la portería uruguaya.
Tampoco pudieron Darwin Núñez y compañía batir a Alisson y el choque finalizó con empate a cero y abocado a decidirse desde los once metros. Valverde inició con gol la tanda y Militao falló el primer lanzamiento de Brasil para dar ventaja a los uruguayos. Más tarde fallaron Douglas Luiz y Giménez, pero Ugarte acabó sellando el pase a la final de combinado dirigido por Bielsa.
Momentos de tensión
El partido empezó tan caliente que tuvo sus primeros incidentes en los primeros 15 minutos. Los protagonizaron Ronald Araújo y Endrick, futuros rivales de Barça y Real madrid en La Liga.
Todo empezó con una jugada en la que ambos se vieron las caras. Ronald quiso marcar territorio y fue a buscar a Endrick en la siguiente acción. Y fue sin balón. El brasileño se fue al suelo. Minutos después, en una jugada sin balón de por medio, Araujo empujó con el hombro por detrás a Endrick provocando una pequeña tangana.
Raphinha, compañero en el Barça del uruguayo, no dudó en defender a Endrick y se encaró con Araujo empujándole y tirándolo al suelo. El árbitro tuvo que poner paz, pero el encuentro ya empezaba a entrar en calor.
En el último cuarto de hora llegó la acción más peligrosa del partido. Una jugada en la que Rodrygo pudo lesionarse de gravedad después de que Nández le hiciera una durísima entrada a la altura del tobillo.
Se lo dobló por completo, con todos los tacos clavados, y provocando un gran dolor en el futbolista del Real Madrid. El colegiado no vio de forma clara la acción, pero tras acudir al VAR decidió expulsar a Nández. Uruguay jugó casi 20 minutos con un hombre menos, pero aguantó el empate y se llevó el gato al agua en la tanda de penaltis.