Superada la hora de partido, el madridismo asiste absorto a lo que lleva persiguiendo durante siete años. Mbappé, se mueve, Bellingham le ve y filtra un pase con la fuerza suficiente como para que altura del pasto polaco no frene al balón y el francés esté en disposición de batir a Musso

Kylian anotó y provocó el desahogo de toda la afición blanca en general y el suyo en particular. Detrás de su derechazo se encuentras años de presiones, de trabajos forzados en París, de cambios de opinión y de cheques blancos. Lo que parecía una utopía se convirtió en realidad en Varsovia

"Esperaba este momento desde hace mucho tiempo. Jugar con esta camiseta, con este escudo, por esta afición. Y ganamos un título, que es importante, en el Madrid hay que ganar siempre. Estoy muy feliz. Y con el gol también, seguro, es importante para un delantero como yo. Pero lo más importante ha sido poder tener el placer de jugar con este equipo, tenía muchas ganas. Es un gran día", explicó Mbappé. 

La cita se anunciaba para el fulgurante debut de Mbappé con la camiseta del Real Madrid. Por primera vez en un partido oficial con ese escudo, ese color. Le faltaba el dorsal, su dorsal, el '10' que heredará cuando Modric haya decidido poner fin a su carrera deportiva en el Real Madrid. 

Sin embargo, más allá de dos sacudidas traducidas en galopadas, el Madrid comenzó extrañando a Kroos. Los blanco actuaban como un cuerpo al que le falta las columna vertebral y no termina de encontar acomodo en el intricado sistema de Gasperini. Algo parecía fuera de lugar. El balón no se movía con la misma fluidez.

Mbappé toca el trofeo de la Supercopa de Europa. REUTERS.

Para los blancos suponía más una urgencia que quitarse pronto de los pies que como un eje sobre el que ordenar sus ideas y juego. Despertó Bellingham y brilló Mbappé. Aunque lo segundo sucedió cuando se desempeñó caído a la banda izquierda, donde se siente realmente cómodo.

Ahí se pudieron ver sus características galopadas, la amplia zancada y el cambio de ritmo tan marcado. "Estoy muy feliz con la plantilla que tenemos. Vamos a mejorar, yo el primero. Es un paso positivo lo de hoy", detalla. Mbappé marca y el madridismo, aunque con siete años de demora, celebra. La era Kylian ya ha comenzado.