El debut del Real Madrid en La Liga no fue el esperado. El equipo blanco se quedó a medias en Son Moix y empató contra el Mallorca (1-1) en el primer día de Kylian Mbappé en el campeonato doméstico. El delantero francés se mostró gris durante buena parte del partido, igual que en líneas generales el resto de sus compañeros. Carlo Ancelotti terminó enfadado y no quiso ocultarlo al hablar con los medios.
El técnico italiano se mostró duro. Habló de un problema de "actitud" y de "compromiso", además de señalar la falta de equilibrio y de concentración de su equipo. El Madrid repitió el once de la Supercopa de Europa y brilló durante los primeros 20 minutos, en los que llegó el gol de Rodrygo, pero le faltó tensión para mantenerse así el resto del encuentro.
Se echó de menos la figura de Kroos, algo que ya se esperaba, puesto que el equipo se descosió en fase defensiva. Lo que tenía que ser un 4-4-2 sin balón, a veces lució como un 4-2-4 con los atacantes blancos descolgados en el campo rival. En ataque, el gran problema fue la tendencia de los cuatro de arriba a caer en la misma banda, la izquierda, sin abrir líneas de pase dificultando la movilidad del balón.
Ancelotti lamentó la "falta de equilibrio" de su equipo a lo largo de la segunda mitad para lograr el triunfo e indicó la necesidad de mejorar en la parcela defensiva de cara a las próximas jornadas.
"Hemos empezado bien, pero en la segunda parte faltó equilibrio, fue un partido que se pudo perder. Si no tienes equilibrio atrás, concedes contragolpes y concedes centros", explicó Ancelotti. "No ha sido un buen partido, ha sido en realidad un partido bastante claro, tenemos que defender mejor, tener más equilibrio en el campo. Somos un equipo muy ofensivo, pero el equilibrio defensivo es fundamental", añadió.
"No quiero poner excusas. Sólo teníamos que hacerlo mejor, con más actitud. Cuando hablas del aspecto defensivo, se habla sobre todo de actitud, de compromiso. Nos costó recuperar el balón, nos costó hacer la presión tras pérdida. Todo eso hay que mejorarlo. El equipo estaba demasiado abierto, debíamos estar más concentrados, más juntos. No es un problema físico, ni mental. Sólo un problema de pensarlo", siguió analizando Ancelotti sobre lo ocurrido ante el Mallorca.
El entrenador blanco explicó que este problema corresponde a "todo el equipo" y valoró el trabajo del elenco mallorquinista, al que se refirió destacando su "buen partido" en el estreno de Jagoba Arrasate en el banquillo bermellón.
"Se puede pensar que es cosa de los delanteros, pero también puede ser de la defensa, de los medios, que no ayudan en esa presión que sí hacen los delanteros… No es un problema de uno, dos o tres. Es un problema de equipo, en este partido no hemos entendido que era un aspecto importante en este partido y el Mallorca sí, mejor que nosotros, han hecho un partido defensivo muy bueno. El empate es correcto", señaló.
33 jornadas sin perder
La lectura de Ancelotti recordó a la que hizo tras el derbi liguero que la pasada campaña perdió el Real Madrid, cayendo por 3-1 ante el Atlético de Madrid en el Metropolitano. El italiano habló también de problemas en la línea defensiva, detectando el problema y encontrándole solución, puesto que, 33 jornadas de Liga después, el equipo no ha vuelto a sumar una derrota.
Ancelotti cree tener claro qué es lo que provoca la falta de actitud señalada por él y ahora busca cómo solucionarlo: "Eso se encuentra con los jugadores que piensan lo mismo. Cuando hay que recuperar, tenemos que pensar en ello todos juntos. De este partido se puede aprender mucho. Está claro dónde podemos tener el problema".
Sobre el estreno de Mbappé en La Liga y su posición en el campo, Ancelotti dijo que puede "cambiar la posición" en función de como se sientan tanto él como Vinicius, dejando abierta la posibilidad de verlo partiendo desde la banda.
Y sobre las posibles rotaciones a lo largo de la temporada, Ancelotti se refirió a la llegada de la Champions League como el momento en el que necesitará mover el once titular con mayor asiduidad.