Kylian Mbappé ha empezado recientemente su etapa como jugador del Real Madrid. Lo ha hecho por la puerta grande, conquistando su primer título europeo a nivel de clubes, algo que no pudo realizar durante sus siete años en el PSG. El delantero francés está centrado en su presente como jugador blanco, aunque todavía tiene rencillas que zanjar con su anterior equpo.

Casi dos meses después de finalizar su contrato con el PSG, Mbappé sigue en disputa con el club parisino, cuyo principal accionista es Qatar Sports Investments. Le Monde publica este martes qye el delantero francés exige el pago de casi 55 millones de euros brutos que, según él, el PSG no le ha abonado conforme a su contrato laboral.

Esta cantidad incluye el último tercio de una prima por renovación, equivalente a 36 millones de euros brutos, que debía recibir en febrero, además de los salarios correspondientes a los tres últimos meses de su contrato (abril, mayo y junio), así como un "bono ético" para esos mismos meses.

L'Equipe ya reveló previamente que los asesores de Mbappé habían enviado al PSG un aviso formal a mediados de junio para reclamar estas sumas. Al no obtener una respuesta favorable, Mbappé ha decidido dar un paso más sin hacer mucho ruido. Según Le Monde, el entorno del jugador se ha puesto en contacto con la comisión jurídica de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) y, a través de la Federación Francesa de Fútbol (FFF), con la UEFA, la máxima autoridad del fútbol europeo.

El 8 de agosto, Mbappé presentó una denuncia ante la comisión jurídica de la LFP, basándose en el artículo 259 de los estatutos del fútbol profesional. Este artículo establece que "los clubes deberán pagar los salarios a los jugadores bajo contrato a más tardar el último día de cada mes", conforme a las normas del derecho común.

Kylian Mbappé, tras la eliminación en Champions League con el PSG EFE

La comisión jurídica de la LFP, con poder disciplinario, tiene la facultad de imponer sanciones a los clubes que no paguen cantidades debidas y vencidas a los jugadores. Estas sanciones pueden incluir la prohibición de fichar nuevos jugadores hasta que se regularice la situación financiera.

Además, el 13 de agosto, el equipo de Mbappé envió una carta a la FFF para informar a la UEFA sobre los hechos. Esta carta, dirigida al director de la comisión de licencias de clubes de la UEFA de la FFF, busca que se evalúen las condiciones financieras del PSG, especialmente en relación con los "atrasos en los pagos", antes de que el club participe en competiciones europeas como la Champions League.