La otra cara de la selección femenina en su camino hacia el Mundial: "No todas pueden ser amigas"

El fútbol femenino español recordará para siempre lo sucedido en el Mundial de 2023 disputado en Australia y Nueva Zelanda. Allí España alzó al cielo su primera Copa del Mundo y lo hizo con Ivana Andrés a la cabeza portando el brazalete de capitana.

Aquel hito histórico que posteriormente se vio empañado con el famoso beso que le propinó Luis Rubiales a Jennifer Hermoso y que desató un terremoto, no fue sin embargo un camino de rosas. Aunque el equipo demostró tener una capacidad de sacrificio y de resistencia impresionante, lo cierto es que la relación entre las jugadoras no siempre fue la mejor.

Eso es lo que ha desvelado un año después la propia capitana, Ivana Andrés, en una entrevista concedida a Onda Cero. En esta emisora la futbolista confesó que el grupo no estaba cohesionado ni todas tenían una gran conexión, aunque sí que aseveró que aquellas diferencias quedaban al margen cuando los partidos comenzaban.

"Lo pasamos muy mal porque la familia que teníamos de la Eurocopa se rompió", contó Ivana. "En el Mundial, con sus más y sus menos, porque la realidad es que había grupos. Supimos separar perfectamente los conflictos que nos pasaron durante todo ese año y nos unimos por ese mismo sueño y ese objetivo. Nos unimos por esa ambición de ganar el Mundial. Fuimos profesionales sobre el campo, estábamos unidas en ese sentido", comentó.

Al dejar estas palabras, la futbolista volvió a ser preguntada por esas débiles relaciones personales: "No había mal rollo, pero todas no pueden ser amigas. Con unas eras compañera, con otras eras amiga. Fuera del campo tienes la relación justa y necesaria de compañeras, pero luego en el campo morías por todas ellas".

Un grupo inactivo

El hecho de que las relaciones entre todas las jugadoras que consiguieron ganar el Mundial no es la mejor tampoco a día de hoy es la confesión de la propia Ivana Andrés: "A día de hoy, no tenemos activo un grupo en el que estamos todas las campeonas del mundo", aseveró.

"Cuando ganamos a Estados Unidos pensamos que podríamos hacer algo grande en el Mundial pese a que se hubiera roto esa unión que había antes. Poco a poco, fuimos forjando nuevas relaciones", siguió Andrés.

Por otra parte, la capitana también lamentó lo que sucedió con el beso que le dio Luis Rubiales a Jennifer Hermoso en la celeración del Mundial. "Se nos robó nuestro momento", comentó la futbolista, apenada del protagonismo que cogió el ya expresidente de la Real Federación Española de Fútbol. "A pesar de todo, ganamos el Mundial", dijo.

Por otra parte, la exjugadora del Real Madrid también quiso dedicarle unas palabras al estado de salud del fútbol femenino español: "A nivel de aficionados, de repercusión y de que los campos estén más llenos, creo que ha cambiado. Pero también creo que en la liga española hay muchas cosas que mejorar todavía, el convenio colectivo, los campos, la normativa... No se ha hecho nada todavía de eso", finalizó.