Eran días tranquilos en la Ciudad Real Madrid durante las últimas semanas del mercado de fichajes. Se preveía que hasta el día del cierre de la ventana de traspasos, este viernes 30 de agosto, no pasará nada más. La carpeta de fichajes estaba cerrada con las incorporaciones de Kylian Mbappé y Endrick, y la de bajas también tras descartarse el adiós de Lunin. Ahora las dudas de Dani Ceballos, pretendido por el Betis, lo agitan todo.
El club verdiblanco, y también el Mónaco, insiste en Ceballos ante la salida de Nabil Fekir a Arabia Saudí, que está casi cerrada. El Betis quiere de vuelta al hijo pródigo, que cumplió a comienzos de mes 28 años y no cuenta con un papel destacado en el Real Madrid. La aternativa es Giovani Lo Celso, del Tottenham.
El Real Madrid, fiel a su filosofía, no cerrará la puerta a Ceballos. Facilitará su salida, siempre y cuando la oferta se adecue a lo que entienden como justo. El centrocampista andaluz es un jugador que tiene contrato hasta 2027, después de firmar su renovación hace un año, y su precio de mercado está en torno a los 15 millones de euros.
Si Ceballos se va, sea al Betis o al Mónaco, la actividad en el Madrid se puede acelerar para mirar en el mercado. Si bien Ceballos no es una pieza clave para Ancelotti, al que le gustarúa seguir contando con él, la situación en el centro del campo no es la mejor en este final de verano.
El Madrid ha sufrido en las últimas semanas las lesiones de Camavinga y Bellingham, que tardarán en volver, como mínimo, un mes. Ancelotti tiene por ahora efectivos suficientes, como se ha visto, pero la salida de Ceballos dejaría la zona en una situación delicada de haber otro imprevisto.
Tras realizar la pretemporada y sin noticias de un deseo de marcharse, el Madrid ya contaba con la presencia de Ceballos este curso. Es por eso que se entienden las salidas de Mario Martín, al Valladolid, o Nico Paz, al Como italiano, dos jugadores que ahora serían candidatos a ocupar el sitio del utrerano en caso de abandonar el equipo. Sin ellos, la posibilidad de mirar al mercado cobra más sentido.
No hay mucho tiempo para rastrear el mercado, que cerrará en poco más de 24 horas, y ya se sabe cómo funciona el Madrid a la hora de contratar desde hace años. El club analiza el mínimo detalle de cada incorporación, sean jóvenes prometedores o perfiles como el de Joselu el año pasado. Kepa fue la solución de urgencia hace doce meses cuando se lesionó Thibaut Courtois y ahora se podría buscar algo similar para 'arreglar' el posible agujero en el centro del campo.
¿Y Alphonso Davies?
Otro nombre que ha rondado las oficinas del Real Madrid este verano es el de Alphonso Davies. Su fichaje es uno de esos que viene siendo planificado desde hace tiempo, señalando al jugador como el indicado para ocupar el lateral izquierdo del equipo blanco durante mucho tiempo. El salto de Ferland Mendy durante la pasada temporada y la dureza del Bayer Múnich a la hora de negociar enfriarn la operación este verano.
Solo un giro drástico de los acontecimientos -que el Bayern bajara mucho su precio deseado, por un jugador al que, recordemos, sólo le queda un año de contrato- cambiaría el escenario que se maneja ahora. Ese no es otro que esperar hasta 2025 para cerrar libre su fichaje, como en los últimos años se ha hecho con Alaba, Rüdiger o mismamente Mbappé.