El FC Barcelona se quisa un peso de encima en forma de deuda millonaria. El club azulgrana, según informan en Alemania, acaba de terminar de pagar el fichaje de Ousmane Dembélé realizado en el verano de 2017, hace siete años. Aún quedaban pagos pendientes al Borussia Dortmund que, por fin, han sido saldados.
Dembélé llegó al Barça como sustituto de Neymar, que se marchó ese año al PSG a cambio del pago de su cláusula de rescisión por 222 millones de euros. El fichaje del extremo francés, que entonces tenía 20 años, se cerró en 105 millones de euros fijos, más variables que han ido disparando el precio con el paso del tiempo.
De tal modo, la operación ha terminado de cerrarse con un montante final de 148 millones, según revela el medio alemán Bild. Esto coloca el de Dembélé como el tercer fichaje más caro de la historia detrás del ya mencionado traspaso de Neymar y el de Mbappé, del Mónaco al PSG por 180 millones, acordado también aquel verano de 2017.
El Barça de Joan Laporta, que heredó esta deuda como tantas otras de la etapa de Josep Maria Bartomeu en la presidencia, cierra un oscuro capítulo con este pago final por Dembélé. El francés protagonizó, desde la vuelta del presidente, uno de los grandes culebrones en el club catalán.
En 2022, Dembélé amenazó con irse gratis del Barça. Su contrato finalizaba ese verano y durante meses dudó de su continuidad, aunque acabó aceptando una oferta por la que pasaba a cobrar un 40% menos que su sueldo anterior. Fue una apuesta personal de Xavi Hernández, implicado directamente en las conversaciones, aunque un año después fue 'traicionado' por el jugador.
En la renovación, Dembélé se guardó una vía de escape que acabó ejecutando en 2023. La cláusula del extremo galo era de 'sólo' 50,4 millones de euros si avisaba antes del 31 de julio de tener una propuesta. El PSG acabó ejecutando la cláusula y el Barça ingresó 35,4 millones, yendo a parar el resto del montante total (15 millones) a los representantes del jugador.
Su salida y ahora el precio final que ha alcanzado la operación marcan la sentencia de una operación ruinosa para el Barça, que no resultó positivamente ni en lo económico ni en lo deportivo. Dembélé, en sus seis años como culé, estuvo lejos de cumplir con las expectativas, lastrado sobre todo por las quince lesiones que sufrió y que le hicieron perderse hasta 119 partidos oficiales.
Dembélé jugó 185 encuentros en el Barça, en los que marcó 40 goles y repartió 42 asistencias. Ganó un total de siete títulos (tres Ligas, dos Copas y dos Supercopas de España), pero su influencia en estos nunca fue crucial y se marchó del club por la puerta de atrás y con la desaprobación de la afición.