El Manchester City le ha ganado la primera batalla legal a la Premier League y las reglas de las empresas asociadas tendrán que ser revisadas por atentar contra la ley de competencia del Reino Unido.
El club mancuniano denunció a la Premier considerar que la actual regulación de empresas asociadas (APT, por sus siglas en inglés) era discriminatoria y que iba en contra de la ley de libre mercado y de competencia.
En un comunicado, el Manchester City ha agradecido al Tribunal Arbitral "su trabajo y sus consideraciones y acogemos con satisfacción sus conclusiones" porque, entre otras cosas, se ha "descubierto que la Premier League abusó de una posición dominante".
El tribunal independiente ha determinado que las leyes son "estructuralmente injustas" y que la Premier League ha sido "específicamente injusta" en cómo las ha aplicado a los clubes. Estas también "han sido discriminatorias" y el propio tribunal ha resaltado que se ha producido un "retraso injustificado" en la valoración del precio de justo mercado de dos transacciones del club, por lo que la Premier "ha roto sus propias reglas".
Además, se ha determinado que el acuerdo del City con Etihad fue bloqueado este año de manera "injusta" porque al City no se le dio oportunidad de responder al análisis que la Premier League hizo sobre el propio acuerdo. En el caso del banco de Abu Dabi, los jueces certificaron que al City no se le dio información de otros clubes sobre la base de datos que utiliza la competición para determinar lo que es valor de mercado justo.
Primera batalla
El Manchester City le ha ganado a la Premier una pequeña batalla, pero todavía le queda mucha guerra que librar. Aún permanece abierto el juicio por los más de 100 delitos financieros de los que se le acusa al club citizen. En concreto, se le reclaman 115 infracciones cometidas entre los años 2009 y 2018.
La mayoría de esos cargos (54) por los que se acusa al Manchester City se basan en no proporcionar información financiera precisa y actualizada desde la temporada 2009-10 hasta la temporada 2017-18.
Otros 14 cargos se basan en no proporcionar informes sobre las compensaciones a miembros y entrenadores que se han marchado del club entre 2009 y 2018. Cinco al incumplimiento de las regulaciones de la UEFA y siete por infracciones de las normas de sostenibilidad de la Premier League entre 2015 y 2018.
Los 35 cargos restantes corresponden a la falta de cooperación con el campeonato inglés a lo largo de los últimos seis años. Muchas posibles infracciones que pueden acabar con la dinastía 'Sky Blue' en el fútbol inglés.
La factura puede ser muy cara para el Manchester City, ya que las penas a las que se enfrenta en el caso de que sea declarado culpable de lo que se le acusa van desde la pérdida de puntos hasta una posible expulsión de la Premier League.