Mientras el debate sobre la fecha de regreso del Barça al Camp Nou, las obras siguen su curso. Este viernes han centrado los focos debido a la batalla multitudinaria que se ha producido durante el desarrollo de las mismas. Una veintena de empleados que trabaja en la remodelación del recinto se ha pegado con palos y seis de ellos han resultado heridos.
Todos ellos estarían durmiendo durante su labor como operarios en el Spotify Camp Nou en hoteles situados en Calella (Maresme), a poco más de 60 kilómetros de Les Corts. El encargado de las obras habría despedido a todos los trabajadores involucrados en la pelea a causa de la misma.
La policía catalana no ha realizado ninguna detención, aunque sí han identificado a algunos de los implicados en la reyerta, según han informado fuentes del cuerpo. Por el momento, se desconocen los motivos que la han provocado.
Reyerta reincidente
Hace unos meses ya hubo otra pelea entre trabajadores de las obras del Camp Nou. El 23 de mayo dos empleados resultaron heridos de carácter leve en una reyerta durante los trabajos de remodelación del estadio. Los dos trabajadores fueron atendidos in situ por personal del Sistema de Emergencias Médicas (SEM), y uno de ellos fue trasladado posteriormente a un centro sanitario.
Este incidente llega días después de que la vicepresidenta institucional del Barça, Elena Fort, ofreciera junto al director de operaciones del Espai Barça, Joan Sentelles, una rueda de prensa en la que explicó el modelo de regreso para los socios al estadio. "El club está trabajando para tener el Camp Nou listo para que el Barça pueda volver antes de final de año".
Sin embargo, la directiva no se atrevió a ofrecer plenas garantías de que esto vaya a ser así: "Hay factores que pueden modificar los planes. El ayuntamiento ya conoce el proyecto de apertura. El departamento de Bomberos nos ha dado el 'visto bueno', y ahora habrá de hacerse un trabajo veloz para otorgar la licencia necesaria para ejecutar la vuelta. Luego habrá últimos pasos y verificaciones para ejecutarla", comentó.
"Está claro que los permisos no tienen por qué ser en sí un problema. Sabemos que el Ayuntamiento trabaja fuertemente para cumplir los plazos. Nosotros calculamos que la primera vuelta sería en el Olímpic y la segunda en el Camp Nou. Si nos avanzamos a ello encontraremos beneficios, y si nos demoramos de los plazos encontraremos pérdidas" agregó la directiva.