Cada partido de fútbol está lleno de intrahistorias que normalmente no ven la luz. Las conversaciones y las discusiones que se dan entre los jugadores, entrenadores y árbitros, habitualmente quedan en el terreno de juego, pero de vez en cuando los propios protagonistas hacen que trasciendan.

Eso es lo que sucedió este pasado fin de semana en el partido de la Nations League que enfrentaba a Finlandia y a Inglaterra. El choque, correspondiente a la segunda división de esta competición, se saldó con el triunfo de los ingleses de manera clara por 1-3, pero sobre todo dejó una de esas anécdotas curiosas en uno de sus goles. 

Los protagonistas de esta historia fueron Jack Grealish y Alexander-Arnold. Los jugadores del Manchester City y del Liverpool acordaron una divertida apuesta que desembocó en el segundo gol de Inglaterra, el que dio la tranquilidad definitiva para el equipo de los tres leones. 

Corría el minuto 74 de encuentro cuando Inglaterra dispuso de una falta peligrosa a favor. El marcador mostraba hasta el momento un ajustado 0-1, y los ingleses buscaban ampliar la ventaja para evitar sorpresas en el tramo final. Esa acción a balón parado acudieron a ejecutarla tanto Arnold como Grealish, y ahí se produjo una conversación que el propio delantero del City se encargó de desvelar posteriormente.

"Bromeé diciéndole: 'si marcas esta falta, te daré 500 libras'. Simplemente lo clavó en la esquina superior, así que le debo una", comentó Grealish. Este incentivo parece que motivó a Alexander-Arnold, porque ejecutó la falta de una manera magistral y anotó un golazo que hará que ahora su compañero de selección tenga que pagarle 500 libras para cumplir con su apuesta. 

La victoria inglesa

El partido terminó resolviéndose con un 1-3 favorable a Inglaterra. Previamente a este gol, en la primer mitad, el propio Jack Grealish había abierto el marcador. A los 18 minutos, el del City inauguró el marcador y le dedicó además el gol a su hija recién nacida.

El choque, sin embargo, se atascó hasta el final de la segunda parte, y fue Arnold con el golazo de falta el que pudo solventar la actuación de los ingleses. Declan Rice, ya en el minuto 84, firmó el tercer gol definitivo que le dio la tranquilidad decisiva a los ingleses. El tanto de Hoskonen para Finlandia fue una anécdota.

Pese a la victoria, Inglaterra no es todavía el líder de su grupo de la Liga de Naciones. Los ingleses siguen viviendo momentos complicados tras la marcha de su seleccionador. Grecia, que cuenta sus cuatro partidos por victorias, es la selección que manda en el grupo con 12 puntos, mientras que los Three Lions se mantienen al acecho con 9 puntos.