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Joan Laporta dio este sábado la cara ante los socios, aunque con estos conectados vía telemática. Es en lo que se ha convertido la Asamblea General Ordinaria del FC Barcelona, una cita que el presidente volvió a utilizar para sacar pecho y desentenderse de lo que dice una oposición creciente; y como no, aludir a "la caverna"

"No hemos hecho caso de las proclamas catastrofistas de algunos que ni están ni se les espera. El camino no ha llegado a su fin, pero es cierto que estamos mejor desde el punto de vista económico y deportivo que en 2021. El club no funciona por inercia. Funciona porque hay gente que trabaja mucho y bien", abrió Laporta la Asamblea.

En su discurso, Laporta reivindicó una y otra vez que el Barça vuelve a ser una referencia: "Volvemos a ser admirados por cómo hacemos las cosas", declaró entre otras afirmaciones valientes. Pasó de puntillas por el caso de Barça Vision y el único punto de autocrítica lo hizo en su balance deportivo de la pasada temporada: "Absoluto respeto a Xavi que hizo un gran trabajo, pero creíamos que teníamos que dar este nuevo impulso".

"Creemos que con los jugadores de la Masia que están en el primer equipo, los que acumulan talento y experiencia y de la mano de Flick los éxitos llegarán. Estamos muy contentos con la plantilla que tenemos y lo que representa la Masia en la primera plantillla. También con Flick y con Deco. Ha reducido la masa salarial deportiva y ha tenido la habilidad de mejorar la plantilla y rejuvenecerla. Eso nos afianza el presente y el futuro", dijo sobre el presente deportivo.

Hizo hincapié más veces en su comparecencia en el buen hacer de Deco como director deportivo: "La reducción de la masa salarial deportiva nos hace tener una ratio de salarios e ingresos mejor. Cuando llegamos, la ratio estaba en un 98%. Era insostenible esa masa salarial. También porque nuestros entrenadores han apostado por los jugadores de casa. Solo se ha invertido en Dani Olmo y Pau Víctor. Él nos costó 47 millones. Gracias al buen trabajo de Deco hemos vendido jugadores por un valor neto de 80 millones. No ha sido un canje para equilibrar la cuenta. Han sido ventas deportivas. Además de ser un club comprador, empezamos a vender bien a los jugadores. Muchos eran jugadores formados en la Masia. Hubo uno que aprovechó una cláusula baja y no pudimos hacer nada. El resto han sido buenas operaciones".

"Estamos saneando la economía en el mínimo tiempo posible", afirmó también antes de que se expusieran los datos. "El club siempre va a ser propiedad de sus socios y socias. Lo hemos dicho por delante y por detrás. El barcelonismo lo tiene claro. Mientras nosotros dirigamos el club, el club será de los socios. Saneamos la economía sin que los socios se rasquen el bolsillo. La temporada 2023/24 deja resultados positivos en 12 millones de euros. Hemos curado la herida que sangraba desde 2017. Lo que el club ingresa y gasta es positivo por primera vez desde 2017. Los ingresos se han incrementado por fin", adelantó.

Habló de las palancas: "Fuimos valientes y dimos tracción al club para hacer los compromisos urgentes que había". "Barça Vision está madurando más lentamente. No ha acabado de funcionar como desearíamos. Todo no ha sido por una mala operativa, ha operado poco. Tenemos la inversión Aramark, más inversores que quieren entrar y tenemos un plan que sustenta este plan de beneficios. Dicho esto, cerramos con unas cifras positivas, presentamos un presupuesto que continua en esta línea con un resultado positivo y a las puertas del 125 aniversario", agregó.

'Contra todo y contra todos'

Laporta también volvió a asegurar que las obras del Camp Nou habrán terminado en 2026 y aseveró que el club ha vuelto "a la primera línea mundial sin perder la esencia de club catalán abierto al mundo". 

Sólo lanzó mensajes optimistas como si el presente del Barça fuera de ensueño: "Este equipo emociona. La Masia es el centro de este equipo. Estamos orgullosos de las alegrías de hockey, balonmano, fútbol femenino, baloncesto... Ganamos en la pista más difícil de Europa. Nos piden academias en todo el mundo y les expliquemos el modelo Barça. Volvemos a ser admirados por cómo hacemos las cosas. Hay que vivir todo con la cabeza alta. Para seguir en esta realidad, esto no es una inercia. Hay que trabajarlo y mantenerlo. La mejor manera es que nos mantengamos más unidos que nunca. Esto es fundamental".

"Luchamos contra todo y contra todos", lanzó como entrada a su momento más beligerante. "Esto no es victimismo. Luchamos contra los que, de manera recurrente, apelan al caso Negreira que estamos ganando en los tribunales. Ahora que nos están juzgando las instrucciones no son favorables. Cada vez que vamos bien, vuelve a salir. Hay gente que no quiere que ganemos, les da rabia que ganemos. Para defendernos no podemos mostrar debilidades. Desean destruirnos. Somos valientes y fuertes. Tenemos que luchar contra estos elementos de donde vienen y lo que buscan. Hablo de la caverna. De los que tienen rabia porque ganamos".

"Mantener esta estabilidad es muy importante. Nos da fortaleza para afrontar los retos que tenemos. Es importante que se apruebe el presupuesto para dar fortaleza a la institución. Os invito a vivir el Barça actual con orgullo y alegría. Si hay estabilidad, el Barcelona seguirá siendo el mejor club del mundo", concluyó.