"El Real Madrid es lo más grande que puedes alcanzar". Esas fueron las palabras de Nuri Sahin en su presentación como jugador blanco. Era verano de 2011 y lucía el '5' de Zidane a su espalda. Estaba destinado a ser el dominador del centro del campo durante la siguiente década. Se cumplieron los 10 años, incluso ya se han rebasado algunos más, y ya se puede decir que viaje del jugador turco no ha sido el esperado.
Sahin fue uno de los grandes atractivos de la temporada 2011-2012. Un fichaje generacional (tenía 22 años) cuya predicción era llegar a ser lo que ha sido Toni Kroos. Pero nunca pudo dejar ese legado. Ni siquiera estuvo cerca de ello. Fue una temporada en la que pasó sin pena ni gloria fruto de las lesiones y la poca confianza de Mourinho en él.
Liverpool, Dortmund, Werder Bremen y Antalyaspor fueron sus siguientes destinos antes de colgar las botas con 33 años. Una carrera que se quedó a años luz de lo esperado, sin llegar a mostrar nunca más el nivel exhibido cuando despuntó con 17-18 años.
El centrocampista turco siempre ha sido un hombre de fútbol y no dudó en iniciar su carrera como entrenador nada más poner fin a la de jugador. El 5 de octubre de 2021 fue nombrado técnico del Anatylaspor logrando una gran racha de partidos sin perder desde la jornada 23 y dejando al equipo en séptima posición liguera.
Sus inicios en los banquillos fueron más que positivos y en diciembre de 2023 dio un volantazo y firmó como asistente de Terzić en el Borussia Dortmund. "No fue una decisión fácil, pero cuando el Dortmund me llama no puedo decir que no", dijo el turco tras dejar su puesto en un Anatylaspor que codeaba con los puestos europeos.
Fue media temporada como mano derecha del entrenador alemán, pero suficiente para vivir experiencias propias de un club de primer escalón europeo, así como de manejarse en partidos de máxima exigencia como una final de Champions League. Un máster que le ha venido de maravilla.
La oportunidad de su vida
La llegada de Nuri Sahin al Dortmund tuvo lugar en el momento más oportuno. Las aguas estaban revueltas entre Terzić y el club a pesar de que después lograra llevar a su equipo hasta la final de la Champions. De pronto, para sorpresa de todos, Terzić rescindió su contrato al finalizar la temporada y la directiva del Dortmund encontró en Sahin el reemplazo ideal.
Estamos muy contentos de poder traspasar la responsabilidad como entrenador a un representante de la generación más joven como Nuri Sahin. En los últimos años se ha estado preparando para una carrera como entrenador y seguirá haciéndolo en nuestro equipo", afirmó Lars Ricken, director deportivo del club.
La situación no era fácil para Sahin. El listón estaba altísimo después de una temporada en la que se perdió la Bundesliga por un punto y donde llegó a la final de la Champions el curso siguiente. Reus, leyenda máxima del club, anunció su marcha y vendieron a su artillero Füllkrug a la Premier League.
Tocaba una reconstrucción y la creación de un equipo a su medida. Llegó Couto cedido del Manchester City, Waldemar Anton fichó por 22,5 millones y Maximilian Beier aterrizó en Dortmund procedente del Hoffenheim por casi 30. Pero la guinda del pastel fue Serhou Guirassy, delantero que la rompió el curso anterior en el Stuttgart con 28 goles en Bundesliga.
Una amenaza
Con Guirassy como principal estrella y secundado por Brandt y Adeyemi, el nuevo Dortmund se ha mantenido como una gran amenaza, especialmente en competición europea. El Dortmund de Sahin es líder de la Champions tras dos victorias consecutivas y una goleada de escándalo al Celtic por 7-1.
Un equipo vertical y reactivo, fiel a la filosofía 'borusser'. Un conjunto más cómodo robando que llevando el peso total del juego, a pesar de haber encontrado en Pascal Grob una brújula más que fiable.
El Borussia Dortmund se presenta en el Santiago Bernabéu sin complejos y con la mentalidad de hacer daño a un Real Madrid que llega con dudas en defensa y muy lejos de alcanzar su mejor versión. Eso sí, en un partido de ida y vuelta pueden tener todas las de perder ante la gran amenaza que pueden suponer Vinicius y Mbappé al espacio.
Sahin regresa al Bernabéu. No lo conquistó como jugador, pero intentará dejar huella en él como entrenador. No será fácil, pero tiene armas suficientes para asaltar el feudo blanco y provocar una crisis en el club de Chamartín.